El Atlético de Madrid está camino de su mejor versión y todo se debe a la gran gestión de Diego Pablo Simeone, el pilar sobre el que se sostiene el club colchonero y cuyo futuro en el Metropolitano necesita concretarse, y de la forma más rápida posible. Desde hace varios meses se está trabajando en su nuevo contrato y, con el parón de selecciones, Gil Marín se ha adentrado en la fecha en la que el técnico argentino tomaría una decisión.
Desde diciembre de 2011, Simeone ha devuelto la competitividad a los rojiblancos y ninguna de las dos partes quieren separar sus caminos después de más de una década compartiendo los mejores y peores momentos de la historia del club. Por ello, la intranquilidad de saber que su vinculación termina el próximo 30 de junio hace que sea el momento perfecto para acelerar la renovación.
Según informa el medio catalán Mundo Deportivo, la directiva es muy optimista ya que el acuerdo está muy encauzado a falta de resolver algunos flecos. Por ello, los principales términos están sobre la mesa con dos buenas noticias tanto deportivo como económicamente.
En primer lugar es que al renovación se extenderá hasta el 30 de junio de 2027, es decir, tres años más una vez expirado el actual que vence a final de la presente temporada. Incluso, el nuevo contrato incluiría una reducción de su salario que habría aceptado para ayudar al Atlético en poner en marcha el tope salarial que fijó con el ejemplo de Antoine Griezmann como último precedente.
Aunque el medio citado anteriormente fija el anuncio oficial en el próximo parón de selecciones en noviembre, la buena sintonía entre Simeone y el club no deja lugar a dudas de que, tarde o temprano, la renovación será una realidad.