Diego Pablo Simeone tiene una cuenta pendiente en la Champions League. Este miércoles en Glasgow, además de tener que lidiar con las cinco bajas y la incógnita respeto al lateral izquierdo, el Atlético tiene una cuente pendiente que debe solucionar para dejar de depender de los resultados que se cosechan en el Cívitas Metropolitano: los resultados a domicilio.
No está siendo fácil para los rojiblancos cuajar buenas actuaciones en los partidos fuera de casa. En las tres últimas temporadas en la Copa de Europa (2021/22, 2022/23 y la actual), los de Simeone han disputado un total de nueve partidos y tan solo han ganado tres. Además se produjeron en la misma campaña, la 2021/22, cuando el Atlético alcanzó los cuartos de final.
En aquel año tuvo un cuadro difícil contra Milan, Liverpool y Oporto pero los colchoneros lograron la victoria en San Siro (1-2) y en Do Dragao (1-3) frente a la derrota en Anfield (2-0). Pese a ello, lograron pasar a octavos de final donde lograron una victoria en Old Trafford ante el Manchester United (0-1) un 15 de marzo de 2022. Desde entonces, los partidos fuera de casa nunca han terminado en victoria para el Atlético.
Aquel año quedaron eliminados ante el Manchester City después de un único tanto en el Etihad Stadium (1-0), un resultado que no lograron darle la vuelta tras empatar a cero en el Metropolitano.
La campaña 2022/23 fue aún más preocupante con pleno de derrotas a domicilio: BayArena contra el Bayer Leverkusen (2-0); Jan Breydel contra el Brujas (2-0) y en Do Dragao contra el Oporto (2-1). Un pésimo balance que hizo que Simeone tocase fondo cayendo último de grupo y fuera de toda competición europea.
Esta temporada tampoco ha empezado diferente en el equipo rojiblanco. Con todo a favor para llevarse tres puntos ante la Lazio en el Olímpico de Roma con 1-0 en el marcador , un gol del guardameta rival en el minuto 94 evidenció un despiste impropio de los de Simeone que les castigó con un amargo empate que sembraba la duda en Champions.
En la segunda jornada lograron un valioso triunfo local por 3-2 ante el Feyenoord y el Atlético es primero de grupo con cuatro puntos, los mismo que los italianos y uno más que los neerlandeses.
Por ello, ganar al colista de la tabla, el Celtic de Glasgow, es vital por dos motivos: afianzarse en los puestos clasificatorios para octavos y quitarse una espinilla para destacar de nuevo por Europa. Los escoceses llevan cero puntos con dos derrotas pero en liga están invictos y líderes con ocho victorias y un empate en nueve partidos.