A diferencia de lo que suele ser habitual, Diego Pablo Simeone no ha dado pistas este lunes de su posible once en la última sesión de entrenamiento del Atlético de Madrid antes del partido ante el Feyenoord. Un duelo clave para el cuadro rojiblanco, que ahora mismo es líder de su grupo de Champions League: si gana estará clasificado, pero si pierde podría acabar la jornada en tercer puesto.
En Rótterdam, la única baja colchonera será la de Thomas Lemar, que se sigue recuperando de su lesión en el tendón de Aquiles. El resto de efectivos están disponibles y, tras hacer algunas pequeñas rotaciones en el duelo ante el Mallorca, todo apunta a que el Cholo recuperará su once de gala.
Jan Oblak estará en portería y todo apunta a que Nahuel Molina recuperará su sitio de carrilero diestro. Axel Witsel y Mario Hermoso son fijos en la zaga, donde llega la primera duda: Giménez y Savic pugnan por un puesto, con el uruguayo a priori como favorito. En la izquierda, Samuel Lino apunta a la titularidad por delante de Rodrigo Riquelme.
Koke es fijo en la medular y Rodrigo de Paul también parece apuntar al once, más aún tras ser suplente el pasado sábado. La otra gran duda de la alineación llega en ese tercer sitio del centro del campo: Pablo Barrios y Marcos Llorente luchan por el puesto.
Arriba, Antoine Griezmann volverá a ejercer de delantero tras jugar más atrás en el último partido. Su compañero será de nuevo Álvaro Morata, por lo que Correa o Depay tendrían que esperar desde el banquillo.