Este verano, Rodrigo Riquelme y Samuel Lino arrancaron la pretemporada con el Atlético de Madrid sin saber si tendrían sitio en la plantilla rojiblanca. Diego Pablo Simeone confió en ellos y, a pesar de entrar poco a poco en sus planes, ya han conseguido instalarse convirtiéndose además en dos de los pilares del equipo, provocándole un problema además al entrenador a la hora de decidir quién juega.
Los dos futbolistas se han alternado en la banda izquierda colchonera, que se quedó huérfana por la salida de Carrasco a Arabia y la lesión de Reinildo. El brasileño fue el que arrancó por ese lado pero, con su lesión, el madrileño ha conseguido hacerse un hueco.
Si Lino fue el titular contra el Mallorca y completó un partidazo, en De Kuip le tocó el turno a Riquelme. El internacional español no quiso ser menos y se salió en Róterdam, tanto que acabó siendo nombrado el MVP del encuentro.
"Creo que hay un nivel muy alto, en el que podemos optar a todo. Es lo que nosotros queremos. Somos un equipo ambicioso y en ello estamos", celebró Rodrigo Riquelme tras recibir el premio.
Ahora, Simeone deberá elegir entre los dos futbolistas para el partido de Montjuic ante el Barcelona de este próximo domingo. El Cholo ha utilizado habitualmente a uno de los dos futbolistas en el carril izquierdo aunque también podría incluirles a uno de ellos en el centro del campo o incluso en la delantera.
"Riquelme jugó un partido extraordinario. Sabía que tenía que jugar él. Lino venía de hacer un partido extraordinario el otro día con el Mallorca, pero las características de Roro entendía que le podían hacer mejor al equipo e hizo un partido increíble", destacó Simeone tras la victoria ante el Feyenoord clave para el pase a octavos en Champions.