Antoine Griezmann es el emblema del Atlético de Madrid. Consagrado como el futbolista más determinante de 2023 en LaLiga, el francés enamora cada semana a los aficionados rojiblancos, que se frotan las manos con todo lo que puede lograr los de Simeone si el francés continúa a este nivel esta temporada.
Recientemente se ha convertido en el máximo goleador histórico del club colchonero junto con Luis Aragonés y eso ha llenado de orgullo al "Principito". Sin embargo existe un tema pendiente que quiere revisar el delantero a lo largo de la presente temporada: su contrato.
"Todo está en marcha", esas fueron las últimas declaraciones de Enrique Cerezo, presidente del Atlético, hace unos días sobre la renovación de Griezmann. Y lo cierto que es el francés quién tiene más iniciativa a la hora de sentarse a negociar ya que el club rojiblanco tiene por delante los siete jugadores que terminan contrato al finalizar la presente temporada. Aún así, una de las tareas que está sobre la mesa del Metropolitano es revisar la situación contractual de Antoine, quién se ha apretado el cinturón hasta en dos ocasiones para jugar con los colchoneros.
Su primera gran renuncia llegó en septiembre de 2021 cuando decidió marcharse del FC Barcelona y perder los 21 millones de euros que ganaba por año para regresar al Atlético, donde pasó a cobrar 13 kilos durante la cesión.
Un sueldo que volvió a rebajarse en octubre del pasado año cuando firmó definitivamente con los colchoneros ganando aún menos, siete millones netos. Ese es el sueldo actual que tiene Griezmann en el Atlético, una cantidad muy inferior a lo que le correspondería teniendo en cuenta su rendimiento y rol en el conjunto de Simeone.
Según informa Diario Marca, el delantero francés espera una llamada del club para negociar una subida de salario. Antoine entiende que demostró amor al club bajando sus expectativas económicas para regresar y su deseo es que su figura sea recompensada.
El actual contrato expira en 2026 y Griezmann ya ha reiterado en varias ocasiones que "el Atlético será su último club en Europa". Aunque su deseo es retirarse en la MLS, el atacante solo piensa en seguir ampliando su hegemonía en el Metropolitano por muchos años (en marzo cumple 33 años). Eso sí, cobrando más.