Dèjá vu de un derbi donde el Cádiz mereció más

José Grima ||| San FernandoLos derbis entre San Fernando y Cádiz parecen tener un guión predefinido que una vez más se volvió a repetir. Los planteamientos eran prácticamente los esperados por ambas partes, en los cadistas sólo la ausencia de Juan Villar podía llamar a la atención.

El comienzo fue esperanzador para los amarillos. No sólo encerraron a su rival, sino que logró a base de centros y acciones rápidas crear acciones de incertidumbre sobre la portería de David Valle. Pero el partido se rompería por completo cuando en el minuto 21 Kike López vio la segunda amarilla, la primera la vio diez minutos antes cuando tocó el balón con la mano. Una inferioridad para los de Raúl Agné que no fue aprovechada por los de Juanma Carrillo. El Cádiz mantuvo el nivel de creación, pero ni unos ni otros gozaron de ocasiones claras antes del descanso.

En la reanudación se esperaba un paso adelante del San Fernando que no llegó, y el Cádiz cambió su filosofía para comenzar a buscar una acción rápida y letal que le adelantara en el marcador. Habría que esperar al minuto 65, cuando una acción rápida que acaba con un tiro de Perico que repele David Valle, es aprovechada por Airam para poner el 0-1. No fue hasta entonces cuando el San Fernando intentó comenzar a funcionar. Un lanzamiento de Pedro Carrión que detuvo Alejandro, y otro de Berni fuera por poco comenzaron a intimidar un partido que empezaba a romperse, con constantes peticiones de faltas que endurecía el encuentro.
Como era de esperar, en los últimos diez minutos el partido se rompería. Gato tuvo la oportunidad de ampliar ventaja pero su lanzamiento fue desviado por David Valle a córner. A renglón seguido, un mal despeje de Gato le dejó en bandeja la pelota a Antonio Ocaña que sorprendió con un fuerte chut de la frontal a Alejandro para poner el 1-1. Es posible que el guardameta pudiera hacer más en una acción bien ejecutada, pero que entró por el centro de la portería.
El descuento traería consigo la búsqueda del gol por ambos bandos buscando el balón parado. Precisamente una falta botada por Carlitos que dio en la barrera, propició una contra de Gato con Villar donde la falta de entendimiento evitó el gol. Al final, empate que reparte la alegría y la tristeza a partes iguales. Ni unos ni otros se marcharon satisfechos.