Juan Muñoz se desayuna al líder
Traspiés en toda regla. Adiós a más de un año sin perder como local. El Cádiz CF líder no apareció este domingo por Carranza. Un dominio de balón estéril ante un rival que aprovechó gracias a su delantero, los dos fallos defensivos de los amarillos. El jugar más de una hora con un futbolista menos le pesó demasiado a los de Claudio. Y la victoria del UCAM (1-2) en Marbella vuelve a dejar la ventaja en sólo tres puntos.
Seguía Claudio Barragán con su política de rotaciones. En esta ocasión Mantecón relevaba a Navarrete en el doble pivote, y Airam era la apuesta en punta dejando a Jona en el banquillo. El Sevilla Atlético tenía bien aprendida la lección y los movimientos habituales de los amarillos en los primeros minutos. Tras un centro de Óscar Rubio que la defensa arrebata a Kike Márquez para que o remate, los sevillistas empezaron a presionar la salida del balón cadista. Un error de Mantecón acabó en una pérdida de balón que Juan Muñoz desde la frontal aprovechó con un tiro ajustado para poner el 0-1. La situación iba a empeorar en el saque de centro, cuando el colegiado Cuadra Fernández expulsó con roja directa a Airam tras una entrada con los tacos por delante sobre Borja.
Con uno menos y por detrás en el marcador, tocaba remar contra corriente. La grada reclamó penalti de Luismi a Fran Machado que no pitó el colegiado. Los cadistas lo intentaban una y otra vez, pero cuando no se equivocaban en la acción, se les cerraba las persianas. Hasta el descanso, sólo un tiro de Kike Márquez fuera tras pared con Fran Machado rozó el gol. La grada volvió a reclamar pena máxima en unas claras manos de Martínez que no vio el trío arbitral.
Comenzaba la segunda parte con una jugada personal de Juan Villar que la defensa envió a córner cuando se cantaba el gol. Jona entraba por Mantecón. Y la ocasión ás clara del partido la iba a firmar el onubense con un lanzamiento ajustado que David Soria mandó a córner. Hugo era la alternativa a Kike Márquez, y justo después una falta lateral lanzada por Romero acabó con un cabezazo de Juan Muñoz, ante la pasividad defensiva, que ponía el 0-2. La jugada deja dudas ante un posible fuera de juego del delantero.
Hasta dos manos consecutivas se iban a pedir en el área del Sevilla. El Cádiz lo intentaba de todas maneras pero sin ningún tipo de acierto rematador. Las dos líneas de cuatro colocadas por Diego Martínez neutralizaba todo intento local.