Cádiz, El Palo y la metamorfosis de ambos

Como el buen vino. El paso del tiempo ha sacado la esencia de este Cádiz CF. La llegada de Claudio Barragán instauró en el ambiente ese aire de optimismo en un equipo que campaba deprimido por la Segunda B.

La visita al barrio malagueño de El Palo invita a echar la vista atrás. Concrétamente hacia aquella jornada 13. La que hizo que apareciera la desconfianza en los dirigentes hacia el antiguo entrenador.
Era 16 de noviembre de 2014. El Cádiz de Calderón recibía al humilde CD El Palo en el Ramón de Carranza. A priori, por la entidad del rival, se antojaba un encuentro sencillo para los amarillos. Pero aquel Cádiz nunca terminó de arrancar. Sufría en los encuentros lejos de Carranza, y en el estadio gaditano lo pasaba terriblemente mal con los equipos que se encerraban.
Uno de esos equipos fue el CD El Palo de Rafa Muñoz. El conjunto malagueño llegaba con la inercia de la campaña anterior. Un equipo humilde, aguerrido y sin complejos que consiguió arrancar un empate en aquella tarde de otoño. El proyecto de Antonio Calderón se tambaleaba y quedaba visto para sentencia en el juicio final ante la Balona la siguiente jornada. Lo que en La Línea ocurrió ya se sabe. El equipo perdió y el técnico gaditano fue destituido.
El Cádiz, el ambicioso proyecto amarillo para ascender a Segunda, se quedaba con 22 puntos tras el empate con los de Málaga en Carranza y la derrota en La Línea. En cambio, el humilde equipo paleño vivía cómodamente en la séptima posición a solo tres puntos de los de La Tacita. La vida al revés en una realidad incuestionable, la Segunda B.
Pero los amarillos despertaron del letargo. La irrupción de Claudio tenía un peso más psicológico que futbolístico. En esta categoría, los partidos no se ganan sin correr los 90 minutos. Esa era la realidad que los cadistas obviaban y en la que ya han aprendido a vivir a base de una intensidad innegociable para el nuevo entrenador. La prueba, 43 puntos en diecinueve jornadas y el liderato.
Los malagueños, por su parte, cogieron el camino inverso. Solo han sumado 17 puntos desde su visita a Carranza (sumaban 18 puntos entonces), han logrado cuatro victorias y han perdido en nueve ocasiones (acumulaban solo una derrota cuando jugaron en Cádiz).
El resultado: el Cádiz marcha primero en la tabla con ocho puntos de ventaja sobre el UCAM, y el CD El Palo lucha por salir de los puestos de descensos. Y el dato, diecinueve jornada después, la diferencia entre El Palo y el Cádiz en la clasificación es de 30 puntos, 26 más de los que había de por medio aquella tarde en Carranza. Una realidad, ahora, más cercana a las previsiones del inicio de temporada.