Desde que se conoció el resultado del sorteo, desde Alicante ha habido muchos recelos con el protagonismo de Quique Pina en el Cádiz Club de Fútbol. El empresario murciano pasó la temporada pasada por el Hércules, y el entorno del club blanquiazul le sigue responsabilizando por el descenso del equipo a Segunda División B.
La inquietud en tierras levantinas es mayor desde que el árbitro concediera el gol de Airam Cabrera que da vida al conjunto amarillo, pues se pidió falta de Jon Garrido sobre Chema en una acción muy discutida. Tanto es así, que incluso se han dado informaciones que hablaban de una supuesta trama para desestabilizar a futbolistas herculanos, encabezada por el propio Quique Pina. Tampoco ha gustado la designación de Sánchez Laso, un árbitro con el que nunca ha perdido el Cádiz, para pitar el partido de este domingo en Carranza.
Este sábado, el diario Información ha contactado con el actual presidente del Granada CF para tratar el asunto, pero Pina ha cortado de raíz las acusaciones. “No he hecho nada, y si me entero de que alguien de mi entorno, empleado del Granada, ha realizado alguna gestión utilizando mi nombre con un jugador del Hércules, me dura en el club un minuto”, aseguró.
Molesto por que hayan utilizado su nombre, Pina asegura que va a llegar “hasta las últimas consecuencias”, a la vez que repite que no tiene “nada que ver”. “Sé que hacer para desestabilizar, les podría llamar para ofrecerles contratos sustanciosos en Primera, pero no he hecho nada”.
El hijo del presidente de honor del Cádiz asegura también que “nadie de la actual plantilla del Hércules” va a jugar en el Granado, e incluso desvela que ha hablado con Carlos Parodi, presidente del Hércules. “Me ha dicho que no sabe nada de este asunto. Alguien ha querido hacerse el artista y el otro el salto, y a quien joden es a mí”, sentencia.