Golpe de efecto de un Cádiz que, por fin, fue ambicioso

Acercarse a ocho puntos del líder no es que sea una gran noticia, pero para este Cádiz que genera tantas dudas es muy importante haber ganado en la Nueva Condomina al Murcia. Sobre todo porque fue capaz de remontar y dio muestras de tener más ambición de lo habitual.

La primera ocasión llegó en un córner lanzado por David Sánchez, que fue peinado en el primer palo y que no pudo rematar con claridad Aridane en el segundo. Era un partido sin dueño, aunque el Murcia tenía la intención de llevar la iniciativa, aunque sin pisar mucho el área de Alberto Cifuentes.
El Cádiz parecía bien colocado y con personalidad para salir a la contra, pero la gente de arriba del Murcia era capaz de crear inquietud con la calidad de Chavero y De Vicente y  el oficio de Azkorra.
En otro balón parado tuvo una ocasión el Cádiz. El córner lanzado por Abel Gómez lo remató de cabeza David Sánchez y el balón se marchó fuera por poco. Obviamente, el que más se jugaba era el Cádiz por la diferencia de puntos y su actitud era valiente, pero sin volverse loco para no dejar espacios a un rival de este calado.
A la media hora de juego habían pasado pocas cosas. Las sensaciones eran buenas porque el Cádiz triangulaba con acierto y ya había forzado cinco saques de esquina, aunque no se podía contabilizar una ocasión realmente clara.
Probar a Simón, portero habitualmente suplente del Murcia, no parecía una consigna de Claudio a sus hombres, que abusaban de la circulación antes de disparar a la portería del Murcia. Por suerte, los locales tampoco llegaban con peligro y Cifuentes vivía una mañana tranquila gracias al trabajo de sus compañeros.
En el inicio de la segunda parte cambió el panorama. El paso adelante lo dio el Murcia y no el Cádiz y dio varios avisos ante la portería de Cifuentes hasta que marcó en el minuto 56 gracias a un gran cabezazo de Chavero.
Ya Chavero había dado un serio aviso en el minuto 49 con un centro envenenado que se habría colado de no ser por la buena intervención de Cifuentes. Por fortuna, el Cádiz reaccionó de inmediato y David Sánchez marcó de cabeza tras un centro de Juanjo y aprovechando la mala salida de Simón.
Era un alivio, pero era incomprensible el paso atrás dado por el Cádiz. El cambio realizado por Claudio en el descanso, quitando a Fran Machado y dando entrada a Nana, era difícil de entender. Y el cambio posterior de meter a Lolo Pla por Despotovic, más de lo mismo.
El gol, en cualquier caso, le dio alas al Cádiz para buscar el segundo. Entraba bien por la derecha gracias a un pundonoroso Salvi y el Murcia, sin el menor complejo, esperaba ya para salir a la contra. Esa ambición que se echó de menos en otros partidos como visitante sí apareció y el Cádiz le daba la vuelta al partido con un tanto de Abel Gómez tras un gran pase de Lolo Pla en un contragolpe perfectamente llevado.
Ahora era el Murcia el que tenía que levantar la cabeza. Buscó el empate y se le vieron las costuras a un líder que es un buen equipo, pero que tampoco va especialmente sobrado. Mucho balón colgado y poco más. La inercia ganadora de otros días no apareció y el triunfo cayó del lado amarillo.