La visita del Lugo al Carranza del próximo sábado (18.00) significará el retorno del equipo gallego al estadio donde logró un doloroso ascenso para los cadistas. El Cádiz venía de perder en la ida de aquella eliminatoria por 3-1 con un pésimo arbitraje de Hernández Cifuentes y tenía que remontar. Al final cayó en la tanda de penaltis.
El Lugo estaba entrenado por Quique Setién y la tarea no era nada sencilla. Jose González alineó a Aulestia; De Coz, Baquero, Murillo, Góngora; Héctor Yuste, Óscar Pérez; Ferreiro, Dioni, Ikechi y Juanjo. La premisa de marcar pronto se produjo con un tanto de Ferreiro a los 12 minutos, pero Monti empataba muy pronto para el cuadro lucense. Óscar Pérez pudo adelantar a los cadistas antes del descanso, pero Escalona le paró un penalti en lo que sería un presagio de lo que vendría después.
En la segunda parte, los goles de Dioni y Juanjo daban muchas esperanzas al cadismo porque había casi media hora para marcar un cuarto gol que equivalía a un ascenso, pero no pudo ser. En la tanda de penaltis marcaron Ferreiro y Góngora y fallaron Akinsola, Cases y Yuste. El tanto de Manu servía para darle el premio a un Lugo favorecido por el arbitraje en el partido de ida.
Fue un palo muy duro porque el Cádiz llegaba como favorito al play off, pero le tocó el Real Madrid Castilla y no tuvo ninguna opción con un 8-1 final entre los dos partidos. Eso hizo mucho daño al equipo, que superó al Albacete en la tanda de penaltis después de dos encuentros sin goles. Ahora las circunstancias son muy diferentes y el Cádiz busca un puesto en el play off, al igual que su oponente, que está a cuatro puntos de la sexta plaza.