Si hubo una sorpresa en la previa del encuentro ante el Tenerife, esa fue la alineación del Cádiz que confeccionó Álvaro Cervera para medirse al equipo de Pep Martí en el Ramón de Carranza. Rubén Cruz era la principal novedad de un once 'huérfano' con la ausencia del máximo realizador del equipo amarillo, Alfredo Ortuño. La decisión del entrenador cadista no pudo darle mejor resultado, ya que la actuación del sevillano fue reconocida incluso por la grada del fortín amarillo que le ovacionó cuando fue sustituido en el 80'.
Álvaro Cervera dejó a todos estupefactos con el once del Cádiz para medirse al Tenerife en Carranza. La ausencia de Alfredo Ortuño en favor de Rubén Cruz sorprendió a todos dada la trascendencia de la cita y la condición de indiscutible que ha tenido el murciano durante la temporada.
Pero el entrenador del Cádiz sabía lo que hacía y que su 'experimento' le daría resultados como así fue finalmente. Rubén Cruz cuajó una buena actuación y se dejó la piel en cada jugada y en cada disputa de balón. Alfredo Ortuño tuvo un papel testimonial participando en los diez últimos minutos sustituyendo precisamente al delantero sevillano.
"Con Rubén tenemos menos gol, pero más trabajo para que los pasadores no tengan tiempo", explicaba Cervera en los prolegómenos del encuentro y, transcurridos los 90 minutos, se demostró que su decisión fue más que acertada. La grada del Carranza lo reconoció y dedicó una gran ovación al ariete sevillano que peleó como nadie durante el partido.
Ante el Tenerife, fue el primer partido en el que Ortuño no partía desde inicio por decisión técnica en favor del utrerano que sólo ha disputado 1.453 minutos durante la fase regular del campeonato. Un premio para el trabajo constante que obtuvo su recompensa en forma de victoria que tendrá que ser materializada definitivamente en el Heliodoro Rodríguez.