El Cádiz sale ileso de la semana más complicada

El Cádiz logró un empate en Vallecas que le permite seguir de cerca la pelea por la zona alta. Fue un partido en el que tuvo una actitud valiente en muchos momentos, aunque terminó más castigado que su rival y hay que dar por bueno el resultado.

El Cádiz empezó presionando arriba, pero el primer susto lo dio el Rayo con un lanzamiento cruzado de Embarba, que salió fuera por poco. A los locales se les veía más decididos y con las ideas más claras. El Cádiz salía con muchas novedades y le costaba tener el balón en su poder.
Cada llegada local llevaba peligro y cabía esperar una rápida adaptación al partido de los amarillos para no empezar a sufrir muy pronto. Sin embargo, la ocasión más clara en el inicio fue del Cádiz. Un robo de Álvaro acabó con Barral solo delante de Alberto, pero falló una ocasión muy clara.
También estuvo cerca del gol Garrido con un cabezazo en el minuto 15 a la salida de un córner, pero el balón se marchó fuera. El Cádiz se había presentado al partido con dos ocasiones muy claras y así metía el miedo en el cuerpo a su oponente. Sin embargo, en una genialidad de Trejo se pondría por delante. Primero hizo un gran control y después enganchó un disparo perfecto que no pudo detener Cifuentes.
El Rayo pegaba primero y el Cádiz otra vez tenía que rematar contra la corriente fuera de casa. Había perdonado en sus dos primeras llegadas y ahora tenía que demostrar su ambición para sacar algo positivo de Vallecas. El equipo estaba algo espeso y su intensidad no se traducía en ataques fluidos.
Eugeni no aparecía y faltaba conexión con los de arriba. Carrillo sí estaba aportando en la banda derecha, pero el Cádiz necesitaba algo más para reaccionar tras el tanto de Trejo. Con el paso de los minutos fue ganando en posesión del balón, pero en general estaba muy incómodo. El Rayo jugaba de memoria y Bebé obligó a Cifuentes a intervenir en el minuto 35 con un lanzamiento desde fuera del área.
La aparición de Eugeni le daba más posesión y parecía tener paciencia para crear, pero no tener espacios condicionaba su juego. Pero Carrillo los encontró en una contra, le dio un gran pase a Álvaro, que regateó al portero y Barral marcó. Pudo pitar penalti sobre el utrerano, pero siguió el juego y el isleño hizo el gol.
La primera parte había terminado bien y comenzó del mismo modo, con el Cádiz con personalidad y presionando arriba. Ahora parecía que las tornas habían cambiado y era el equipo gaditano el que estaba más a gusto en el campo y recuperaba el balón con facilidad. Álvaro García hacía estragos por su banda y el peligro era constante. Un disparo de Álex estuvo a punto de entrar.
Eran los mejores minutos del Cádiz en el partido, con una recuperación casi constante e incluso con brillantez. El Rayo parecía incómodo y sin paciencia, pero la calidad de arriba provocaba un respeto constante. Tras un primer cuarto de hora de dominio cadista, el Rayo recuperó el balón y empezó a llegar por bandas y creaba algo de peligro.
Al Cádiz se le veía algo cansado de repente y Cervera empezó a mover el banquillo. Abdullah entró por Eugeni para tener más el balón en la medular. Cuando quedaban 20 minutos para el final, el partido estaba abierto y nadie parecía tener el control. El Rayo metía arriba más madera con Comesaña y Javi Guerra.
Daba la impresión de que el final iba a ser de sufrimiento para el Cádiz porque el Rayo parecía llegar más entero, pero Cervera daba entrada a Jona por Carrillo, que acabó tocado. En el tramo final daba la impresión de que a los amarillos les iba bien con el empate, mientras que el Rayo seguía insistiendo, como con un remate de De Tomás en el minuto 81. 
El Cádiz intentaba enfriar el partido porque veía que el rival tenía más opciones de llevarse el triunfo. Cervera quitaba a Barral y metía a Aitor en un momento en el que ya el punto era un tesoro. En los últimos momentos el Cádiz llegó al área del Rayo y le quitó la opción de ganar a su oponente. 

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