El Cádiz CF empató ante el CD Lugo en el partido correspondiente a la jornada 30 de LaLiga 1|2|3. El cruce, disputado en el Ramón de Carranza, se saldó con 1-1 en el marcador. Este encuentro evidenció, de nuevo, una circunstancia que se viene sospechando en las últimas jornadas: Que el Cádiz juega mejor con un nueve de referencia.
Es cierto que el Cádiz cuajó unos primeros minutos de muchos quilates. Las combinaciones entre Álex, Salvi, Aketxe, Manu Vallejo y Darwin Machis fueron de mucho nivel. Sin embargo, tras el reajuste del conjunto lucense, estas dejaron de producirse con tanta frecuencia. El Lugo comenzó a morder más en el centro del campo en lugar de esperar frente a su portería. De este modo cortocircuitó la circulación de balón en la zona medular y se encontró con más opciones de contragolpear.
No obstante, en el minuto 60, Álvaro Cervera reajustó. El técnico cadista dio paso a Edu Ramos y Dejan Lekic. Este último dio alas a un Cádiz ahogado en el centro del campo por la presión lucense. El serbio permitió a su equipo salir de forma más directa. Mediante envíos en largo simplificó mucho la labor a sus compañeros. Gracias a su envergadura, ganó varios balones que dieron oxígeno y permitieron al Cádiz subir líneas en ataque. De hecho, en una jugada en la que andaba caído a la derecha, condujo y se deshizo de un rival. No obstante, con todo a su favor, tardó demasiado y un defensa le robó la cartera.
De hecho, en las últimas dos jornadas (derrota contra al Elche y empate ante el Lugo) el frente de ataque ha sido ocupado por Manu Vallejo y Darwin Machis. Quizá sean los jugadores con más talento de la plantilla, pero sin duda carecen de unas cualidades a nivel físico y táctico que una referencia como Lekic o incluso Querol sí que tienen en su juego. Habrá que ver qué decisiones toma Cervera de aquí en adelante.