El Cádiz CF tenía que ser un equipo que basara su capacidad de competir en la seguridad defensiva, pero hace muchas jornadas que eso se ha perdido. Ya es el más goleado de LaLiga Santander con 39 tantos en su contra y lleva tres partidos seguidos recibiendo cuatro goles en cada uno de ellos.
Álvaro Cervera se puso como objetivo después del partido de San Sebastián frenar esa hemorragia defensiva, pero no lo ha logrado. Desde el mismo arranque de partido contra el Athletic fue un muñeco en manos de su rival y la imagen no pudo ser peor en ese apartado del juego.
Ha encajado 15 goles en los últimos cuatro partidos cuando en los 19 encuentros anteriores había recibido 24. Es un hecho evidente que el rendimiento va a menos de un modo preocupante y Cervera parece no encontrar soluciones en la plantilla actual.
Además, el club no ha sido capaz de reforzar la medular ni el centro de la defensa en el mercado invernal y eso ha dejado un panorama muy negro. La esperanza puede estar en recuperar esa pareja de pivotes formada por Jonsson y José Mari y que Fali vuelva a la defensa.