Manuel Vizcaíno, presidente del Cádiz CF, acudió este miércoles a una charla organizada por la plataforma Alma Cadista. Abordó múltiples tema de la actualidad del club amarillo y dos de ellos fueron polémicos. Por un lado fue preguntado por el enfrentamiento en los tribunales con Álvaro Cervera y, por otro, la salida de Salvi.
En el asunto judicial por el finiquito con el entrenador, hay que recordar que le reclama una importante cantidad. El club se ampara en que el técnico realizó declaraciones en las que mostraba su sensación de incapacidad para revertir la situación deportiva. Cervera lo niega y solicita que se le pague la totalidad de un contrato que se firmó en junio de 2020.
"Alguien puede entender que lo correcto era tender una alfombra roja y nosotros que hay que pelear por algo que entendemos que interesa a la entidad. Nosotros tenemos nuestros argumentos y creemos que son válidos. El club se ha caracterizado por no entrar en conflictos, pero a veces se ha peleado a muerte y creo que es la circunstancia que interesa a la entidad por muchos motivos. La gente no conoce muchas cosas y se decidirá en los tribunales. Hay veces que hay que poner pie en pared con algunas actitudes", dice Vizcaíno al respecto.
Se le recordó que se ha despedido con honores a jugadores con poco peso en la historia del Cádiz como Augusto Fernández y que no ha sido así con Salvi. Al respecto comenta que "Salvi es como si fuera un hijo mío. Cuando alguien es así y uno entiende que ha habido momentos en los que no te ha acompañado, se te hace difícil asumirlo. No voy a hablar más de Salvi, no quiero entrar en conflicto porque es muy buen chaval. Va a salir del club como él ha querido salir y ahí lo voy a dejar".