La nueva vida de Momo: de vivir una pesadilla a estar en el radar de la selección de Senegal

El árbol que se dobla, el viento no lo rompe. Es un proverbio africano que puede encajar bien en la vida de Momo, futbolista del Cádiz CF que a sus 24 años ha vivido situaciones muy complejas que ha sabido sortear hasta llegar a cumplir su sueño: jugar en LaLiga Santander.

Ya había debutado oficialmente en un partido de Copa, pero por primera vez actuaba en uno de los mejores campeonatos del mundo. Atrás quedaba la pesadilla de sentirse utilizado por gente del fútbol que sólo miraba por su propio beneficio.

Fueron mucho meses sin jugar, con el problema de fondo de una sanción de la FIFA que quedó en nada después de una denuncia del Murcia por una supuesta alineación indebida y una posterior del Watford inglés. Siempre contó con la ayuda y el apoyo de su agente, Pape Momar Mbaye, que nunca dudó de su inocencia ni de su capacidad deportiva.

"El año pasado llegamos a un momento en el que Momo pensaba que se merecía un sitio en el equipo. Hubo ofertas de Francia, pero su corazón está en el Cádiz desde 2017 y se quedó. Yo dije que volvería como una estrella y se reían de mí, pero ya está jugando con el Cádiz en Primera. No estaba yo tan equivocado", afirma el agente.

Ahora todo ha cambiado. El central tiene ficha del primer equipo cadista y está en la parabólica de la selección absoluta de Senegal. Ya empezó a dejar buenas sensaciones en el amistoso del verano en el Sánchez-Pizjuán de Sevilla y ante el Barcelona cuajó una actuación más que digna.

Comentó Sergio González que es uno más de los centrales del equipo y no descarta que pueda tener más continuidad en otro momento. Momo aguardará con paciencia porque sabe que su momento llegará. La lluvia moja las manchas de un leopardo, pero no se las quita. Otro proverbio africano que define el sentir de un futbolista que piensa que lo mejor está por venir.