El presidente del Cádiz CF, Manuel Vizcaíno, habla sobre el caso de Enríquez Negreira y todo lo que se viene comentando desde la pasada semana, con el Barcelona en el centro de todas miradas. Habla en ElDesmarque y rompe una lanza en defensa de los árbitros.
"Esto aparenta ser una golfada y hay que llegar hasta el final en el ámbito penal. Pero se está haciendo demagogia con respecto a que se ha cambiado la ley en el ámbito deportivo para que prescriba a los tres años. Eso es mentira, la ley de 1990 ya contemplaba los tres años de prescripción y no ha lugar a que se haya modificado hace tres meses", afirma.
"En UEFA y FIFA el delito no ha prescrito según la normativa y sí podrían intervenir deportivamente, mientras que en España será penalmente", aclara.
Por su experiencia personal considera que no se puede dudar de la honorabilidad de los árbitros: "Mi padre entró en el fútbol en el año 80 y yo en el 2002 y está hablando uno que ha defendido la independencia de los árbitros, que es el quid de la cuestión. Durante 42 años yo no he visto que se haya vendido un árbitro. Como dice Medina Cantalejo, yo también pongo las dos manos en el fuego porque ningún árbitro se ha vendido. Están dando por hecho que el estamento arbitral representa a los árbitros. Y a los árbitros hay que dejarlos tranquilos".
El dirigente considera que la clave está en el sistema, algo que cree resuelto en la Premier League: "Si los árbitros fueran independientes como lo son en Inglaterra, y si nadie los utilizara como moneda de cambio, estas cosas no pasarían. Está dando todo el mundo por hecho que se han vendido los árbitros. Se usa como moneda de cambio la fuerza del árbitro por estamentos que no son los propios árbitros".
¿Puede ir tranquilo el presidente del Cádiz a los partidos, con los errores que se han cometido en contra de sus intereses? "Yo voy absolutamente tranquilo a los partidos. Otra cosa es que no hay un protocolo claro del VAR o la presión política con respecto al estamento arbitral. Y, por supuesto voy a pelear para que se repitan los 10 minutos del partido contra el Elche porque eso no fu un error, fue una negligencia. Lo voy a pelear hasta el final".
"Ayer se volvieron a equivocar en contra del Cádiz según el criterio de la mayoría. Son errores interpretables y de eso me quejo y me quejaré, pero no se puede dar por hecho que un árbitro se haya comprado o vendido porque no es el caso", finaliza.