La lesión de Ocampo ha sido el centro de la rueda de prensa ofrecida este jueves por Sergio González. El entrenador del Cádiz ha reconocido el palo que supone para el equipo, pero se centra en mandarle ánimos al uruguayo y en acertar con los sustitutos que va a encontrar en la propia plantilla.
"Es una noticia muy triste. Es una baja muy sensible. Se encontraba en un momento muy bueno, extraordinario, aportando mucho al equipo. Era una vía de soluciones en el ámbito ofensivo. Ha sido un bajón importante, lo primero para él por cómo han sido los acontecimientos y luego todos nosotros. A partir de ahí tenemos que estar cerca de él, apoyarle, darle los medios para que se cure y otros compañeros tienen la oportunidad de tener más minutos. Dejamos de tener un arma muy eficaz, pero estas son las cosas del fútbol", señala.
En el transcurso de los acontecimientos desde que se lesionó antes del partido ante el Rayo Vallecano considera que no ha habido nada extraño y que ha sido una sorpresa para todos el resultado final: "Después de la lesión él se encuentra bien, se pone a entrenar, se hace pruebas, se pone en manos de la readaptación y siente una molestia más fuerte. Se vuelve a hacer pruebas y se diagnostica que el cruzado está tocado. Las sensaciones era que estaba apto para entrenar y por eso ha sido la sorpresa mayúscula para él y para nosotros".
Sobrino, Bongonda, Chris Ramos... Sergio no aclara quién será el sustitito, pero se muestra optimista: "Sustituir a Brian va a ser imposible, pero tenemos armas para paliar su baja. Tenemos 26 armas y perdemos una. No vale pensar más en ello. Le deseamos lo mejor y podemos decir que tenemos algo de suerte de que tenemos futbolistas que pueden ocupar con ciertas garantías esa demarcación".