Sergio González, entrenador del Cádiz, ya piensa en el Celta. Lamentó al final del partido los fallos que costaron la derrota, pero en líneas generales considera que su equipo firmó una actuación convincente ante un rival de mucha talla. Espera lo máximo de sus hombres en las dos últimas jornadas.
"Hemos empezado muy bien, mejor que ellos. Un error de ser expeditivos nos ha costado el primer gol y eso nos ha hecho daño. En el 44 llegó el segundo en otra acción evitable. Nos hemos hecho el harakiri", dijo.
"En la segunda parte lo hemos intentado y hemos podido acercarnos, aunque ellos también las han tenido. Hay que olvidarlo y centrarnos en Celta y Elche. Habríamos firmado llegar así dependiendo de nosotros mismos", dijo.
Sobre el partido del Pacha Espino comentó que "todos podemos cometer errores. La mejor receta era que siguiera en el campo para darle la vuelta. Lo hemos recuperado de cara a los dos próximos partidos".
Vienen dos finales, pero ve al equipo preparado: "Estamos viviendo en el alambre continuamente. Contra el Valencia y el Valladolid hemos estado fuertes y hay que ir convencidos. El 2-0 ensombrece el buen partido que hemos hecho, sobre todo en el inicio. El equipo ha demostrado fútbol y ganas".