Sergio González celebra su cumpleaños con el cariño y complicidad de los jugadores del Cádiz

El Cádiz CF atraviesa un momento complicado en lo deportivo. Con apenas 10 puntos en las 12 primeras jornadas, y al filo de los puestos de descenso, la racha de resultados empieza a dar vértigo. El equipo no mostró una buena imagen en Getafe, y algunas voces ya se plantean si es necesario un giro de timón. Sea como fuere, esta jornada el cuadro cadista no compite debido al aplazamiento del partido ante el Mallorca por el Israel - Kosovo. Por tanto, Sergio González, cuyo puesto no corre peligro de momento tiene por delante un largo período de tiempo para seguir trabajando con todos sus futbolistas salvo Darwin Machis. Así podrá seguir reajustando e intentando que el equipo dé un salto competitivo y vuelvan las victorias.

No obstante, el 10 de noviembre se trata de un día especial para el técnico de L'Hospitalet. Y es que Sergio González cumple 47 años, y lo hace en un momento delicado para el Cádiz. Eso no ha privado al entrenador de recibir el cariño y la complicidad de sus futbolistas durante la sesión matinal de este viernes.

Ni Sergio González se libra del pasillo de collejas de la plantilla

En primer lugar, ha sido José Mari quien se ha acercado a él con una pregunta incisiva y una mirada inquisitiva: "¿Hoy es tu cumple, no? ¿Hoy es tu cumple?", le ha insistido el capitán del Cádiz. Tras la respuesta de Sergio, parece que se escucha al mediocentro sugerirle la idea de invitar a la plantilla a comer. Tras las risas del técnico, Roger Martí y un miembro del cuerpo técnico han lanzado al aire una idea. "¡Pasillo, pasillo!", algo con lo que el míster, al principio, no estaba de acuerdo. "¡Sí, hombre! Encima de... apaleado", espetó entre risas, justo antes de adentrarse al pasillo de collejas que ya habían preparado sus futbolistas.

Sergio pasó con prisa, y ninguno de los futbolistas le quiso dar demasiado fuerte, quizá por respeto, o quizá por miedo al banquillo. Sea como fuere, cerró la anécdota charlando brevemente con Conan entre risas.

Esto refleja el buen ambiente que tiene el vestuario del Cádiz. Lejos de las caras largas, el estrés y los reproches, este período complicado se afronta con tranquilidad. Con exigencia y tensión también, por supuesto, pero sin que eso perjudique al buen ambiente que hay en la plantilla y en cada entrenamiento con Sergio González.