Los prolegómenos del partido entre el Cádiz y Osasuna están dejando claro que es un partido de algo más que tres puntos para los amarillos. Tras los dos empates fuera de casa, en Mallorca y en Vigo, los cadistas necesitan vencer al cuadro navarro para dar un salto en la clasificación.
Sergio González, entrenador del conjunto gaditano, dijo en la previa del choque este domingo el equipo necesita "un campo que esté hirviendo" y todo apunta a que será así. El ambiente es muy especial y el cadismo ha captado que sus jugadores necesitan una atmósfera única para vencer a los navarros.
Desde dos horas antes del inicio del partido estaba llena la calle por donde llega el autobús del equipo al estadio. En las redes sociales se habían citado los aficionados para que el bus se encontrara con un recibimiento especial y así ha sido.
"Nuestro único objetivo es ganar el partido de mañana. Nosotros somos los primeros dolidos, pero mañana necesitamos un campo que esté hirviendo y que piense que su partido lo tienen que ganar en la grada para que nosotros ganemos nuestro partido en el campo", dijo Sergio González.
La eliminación en la Copa del Rey contra la Arandina molestó mucho al sector de la afición más exigente. Pero han bastado tres días para sanar la herida y que el cadismo esté de nuevo entregado con su equipo para darlo todo en un nuevo encuentro liguero.
El Cádiz no consigue ganar desde el 1 de septiembre. Fue contra el Villarreal, con calor de verano y con el mercado a punto de cerrarse. Han pasado muchos días desde entonces y el equipo necesita una victoria como el comer para escapar de la zona peligrosa de la tabla. Para ello se va a apoyar en una afición que, una vez más, está por encima del conjunto cadista.