Koke Contreras desvela las críticas entre compañeros del Cádiz en foros de internet: "Hay pruebas"

Koke Contreras fue uno de los futbolistas que descendieron con el Cádiz CF a la extinta Segunda B. En la temporada 2007/08, la única como cadista de un portero que fue internacional absoluto, el cuadro gaditano caía a los infiernos pese a diseñar una plantilla que debía pelear con los de arriba en la categoría de plata.

La realidad del club amarillo ha cambiado, pues pese al último descenso a LALIGA HYPERMOTION, el Cádiz CF volvió a la élite nacional. Con Gaizka Garitano saldrán o no las cosas, pero el vestuario parece una familia desde fuera. Algo que no ocurrió en aquel equipo en el que militó Koke Contreras, como relata en su charla concedida al podcast Offsiders.

Koke Contreras desvela críticas entre compañeros del Cádiz

El exportero recordó su año en la Tacita y desveló un asunto cuanto menos sorprendente. En aquel Cádiz no había unión. Tanto es así que, como denuncia Koke Contreras, los futbolistas amarillos se criticaban entre ellos usando nombres anónimos en internet: "Fue el único año que yo he sentido que no había unidad en el vestuario. Fíjate las cosas que descubrimos. Empezaban los foros. Tenemos pruebas fehacientes que había dos jugadores por lo menos que, con anónimos, se metían en los foros a criticar. Un desastre. Estos por un lado, estos por otro, un vestuario de mierda, cuatro entrenadores... Eso no tenía futuro ninguno".

Aquella situación marcó tanto al portero que decidió colgar los guantes una vez finalizada la temporada: "Eso fue lo que me hizo jubilarme". Por último, Koke Contreras cierra su etapa en el Cádiz con un problema con el entrenador que acabó el curso: "Cuando acabo ese año, aparte tuve un problema con el último entrenador. El míster cenó con varios periodistas de la ciudad el mismo día que yo concedí una entrevista a un medio de Málaga. Los periodistas le dijeron que yo me iba a dejar perder ese partido porque quería el año que viene jugar en el Málaga en Primera. Que a mi me diga el domingo que iba a jugar fue la puñalada más grande que me han dado en la vida. No quería ir al partido. Y me da vergüenza tener ese sentimiento porque me parece que está fuera de lo profesional, pero me dio mucha rabia. Acabó la temporada, jugué todo menos los últimos cuatro partidos y decidí ir a Málaga, pero evidentemente, aunque hubo posibilidades, pero estaban en la ley concursal".