Leganés y Eibar, dos viejos conocidos
Por primera vez en su historia, el Leganés y el Eibar se verán las caras en la máxima categoría del fútbol español reeditando entre los grandes un duelo que durante años se convirtió en habitual en la división de plata.La suya ha sido una trayectoria con ciertos paralelismos. De hecho basta con echar la vista atrás hacia la cercana temporada 2012-2013 para comprobar que ambos coincidían en grupos distintos de la Segunda División B.
Mucho ha cambiado su vida desde entonces. El primero en experimentar el éxito desde esa misma campaña fue el conjunto vasco, por partida doble además tras encadenar un par de ascensos consecutivos. Más le costó a los blanquiazules, que volvieron a Segunda el año siguiente y después de dos cursos lograron su mayor hito como club, el pasado verano.
Sin embargo, en ningún momento de ese camino sus destinos se cruzaron. Para encontrar el último precedente oficial hay que remontarse hasta abril del año 2004, cuando Ipurúa acogió un duelo de la trigésimo tercera jornada del escalón de plata. En aquella ocasión el enfrentamiento terminó con empate a uno.
Fue el punto final a una racha de once temporadas seguidas encontrándose dos veces en cada una de ellas. Tal acabó siendo la recurrencia que el Eibar es el equipo de la actual Liga Santander al que más veces se han enfrentado los madrileños. En el caso de los armeros únicamente Las Palmas, Alavés y Sporting han jugado más veces contra ellos.
Analizando los resultados, el balance hasta el momento es favorable al Leganés. Solo en cuatro ocasiones de las veintidós cayeron los 'pepineros', tres de ellas como anfitriones. Por el contrario se impusieron en nueve y cosecharon asimismo nueve empates.
Se dan además datos curiosos como lo es que el actual entrenador del plantel que ejercerá como local, Asier Garitano, vistiera los colores del rival como titular en el partido que midió a ambos en la segunda vuelta de la 1995-1996. De aquella cita se marchó perdiendo. Esta vez deseará que el desenlace se repita para que la alegría del presente borre la tristeza del pasado.