El Leganés visitaba al Girona en el partido inaugural de la jornada 24 de LaLiga Santander. Dos de los equipos revelaciones de la categoría se citaban en Montilivi, con todos los sentidos puestos sobre el terreno de juego... pero con un ojo mirando a la clasificación. Un objetivo casi cumplido para ambos equipos: la salvación; y un sueño, que parecía inalcanzable a principios de temporada: Europa.
El choque comenzó con los hombres de Machín llevando la batuta del juego, mientras que los de Garitano esperan con paciencia en su campo. En los primeros compases, el Girona abusó de su arma más peligrosa, los centros al área, y en unas de estas llegó la primera gran ocasión de la noche. Testarazo de Stuani y paradón de Cuéllar abajo. Corría el ecuador del primer acto cuando Mantovani golpeó con la mano un balón dentro del área: amarilla, penalti y gol del uruguayo, que adelantaba a los catalanes merecidamente.
El Girona también tuvo tiempo para marcar el segundo antes del ecuador de partido. Contragolpe de manual, carrerón de Portu y latigazo a la escuadra. Golazo, descanso y partido encarrilado para los de Machín antes de enfilar el túnel de vesuarios. El segundo tiempo comenzó con las intentonas pepineras por buscar un gol que le metiera de lleno en el duelo. Sin embargo, la producción ofensiva de los madrileños este viernes en Montilivi era nula. El Girona puso la sentencia en los últimos minutos con un cabezazo de Juanpe tras un centro medido de Granell.
Con esta victoria, los pupilos de Machín se colocan momentáneamente a solo dos puntos del Sevilla, equipo que marca la zona europea y siguen soñando con jugar competición continental en su primer año la máxima categoría de nuestro fútbol. En cambio, el Leganés se atasca en zona de nadie y encadena tres partidos consecutivos sin saborear un triunfo.
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