Tras la abultada derrota en el Santiago Bernabeu, Iago Aspas, al igual que hizo en zona mixta fue el encargado, tras el primer entrenamiento de la semana, en dar la cara por el equipo, un Celta que ya se prepara para el duelo ante la Real Sociedad.
El delantero de Moaña reconoció que perder así le molestó mucho, "la verdad es que no hemos hablado mucho del partido, estuve todo el día jodido en casa, tenemos que cambiar esa apatía en el segundo tiempo porque yo me fui al vestuario pensando que podíamos ganar" confesó, que como el resto del equipo, incluido Eduardo Berizzo no encuentra explicaciones al bajón del Celta en la segunda mitad, "no sé explicarlo, no soy el entrenador, pero cada fallo que teníamos era gol, contra este tipo de equipos los fallos te penalizan mucho, ya nos pasó contra el Barcelona", afirmó.
A pesar de que Iago Aspas fue de lo mejor del conjunto celeste ante el Madrid, el canterano acabó sustituido, pero es algo que como explica el propio jugador entiende por lo mucho que lleva jugado y lo importante que aún falta, "me sustituyó porque es una decisión del míster, llevo jugados casi todos los minutos y quedan muchos partidos importantes" dijo. Jugar era su objetivo al volver al Celta y cree que lo está logrando, "lo que quería era jugar y disfrutar lo máximo posible, estoy cerca de superar las cifras de mi año en primera y eso es bueno para mi y para el equipo" explicó Iago.
El Celta ha perdido una posición, pero sigue en puestos que pueden dar el acceso a Europa, Aspas firma esta posición a final de temporada, "a pesar de la derrota la jornada no es mala, y firmo ser séptimos y jugar una previa, que por presupuesto no es nuestro sitio" explicó, dejando claro que este tipo de derrotas se olvidan ganando el siguiente partido, "si ganamos a la Real todo cambia, si hay que perder que sea un partido de siete que no siete de uno. Es verdad que encajamos mucho, los defensas están fastidiados porque a veces se ven un poco desbordados, pero yo firmo encajar 80 goles y jugar en Europa" confesó. Aspas cree que la sangría en defensa es problema de todo el equipo y de la falta de experiencia, "tenemos que mejorar en defensa desde la delantera, tenemos que ser más bloque, a veces es tener un poco más de experiencia y saber estar en el campo" concluyó.
Sin lugar a dudas la peor noticia que se trajo de Madrid el Celta es la lesión del chileno Pablo Hernández, que sin un diagnóstico definitivo puede perderse alrededor de cuatro a seis semanas, tal como explicó el doctor García Cota en Onda Deportiva Galicia Sur, para Aspas la baja de su compañero es muy importante por lo que aporta al equipo, "la baja de Pablo es grave para nosotros, a balón parado nos da mucho en ataque y defensa y nos tendremos que apañar sin él" sentenció el moañés.