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El 7 de abril, día funesto para el Celta

Alberto Bravo

Si hay  un día del año en el que el Celta no debe competir, un día en el que lo mejor sería pedir un aplazamiento, un día para quedarse en la cama, ese el el 7 de abril, un fecha maldita para un equipo que sólo ha sabido cosechar derrota tras derrota en tan funesta fecha.

A lo largo de su historia el Celta ha tenido que jugar siete partidos el 7 de abril, habría quién incluso hablase de coincidencia cabalística, pero es que en esos siete encuentros el Celta no es que sólo haya cosechado siete derrotas, si no que además habría que remontarse al primero de esos partidos, en 1940, para ver un gol de los celestes.
Ese fue el primero de los partidos en un 7 de abril, curiosamente día mundial de la salud, en los que el Celta se mostró constipado, la primera temporada del equipo en la máxima categoría, su debut en San Mamés y primer palo. Un 4-1 con tres goles de Unamuno adornado con otro de Gorostiza hacían morder el polvo al conjunto dirigido por Comesaña, donde Nolete lograba el tanto del honor, el único gol del Celta en esta fecha.
Diecisiete años después el Celta se volvería a encontrar con un partido el 7 de abril, otra vez en tierras vascas el Celta caía por un contundente 3-0 ante la Real Sociedad, en ese equipo había jugadores emblemáticos como Padrón o Carlos Torres, pero sobre todos ellos un mito del celtismo Pepe Villar que defendió la celeste en 248 ocasiones.
Habría que esperar muchos años para que el Celta volviese a disputar un nuevo partido el 7 de abril, corría el año 1974, la dictadura franquista estaba agonizando y el Celta visitaba Sarriá para enfrentarse al Español, los vigueses caían por la mínima ante los catalanes gracias a un gol de De Diego. En ese equipo estaban Doblas, Lezcano y Jiménez, dirigidos por Juan Arza.
Saboreando casi los ochenta el Celta perdía en el Santiago Bernabeu en 1979, el Real Madrid de Molowny lograba un 2-0 con goles de Juanito y Aguilar. Esa temporada el Celta descendería a Segunda División con Manolo, 'el gran capitán' que defendió la camiseta celeste en 532 partidos y Villar a su lado, uno de los mejores canteranos que el club ha tenido en su historia.
En pleno proceso para convertirse en el 'EuroCelta' el equipo visitaba un campo sencillo, el Romano Jose Fouto, donde el Mérida ajusticiaba al equipo con dos goles de un jugador que acabaría en el Celta, Prieto. Nada pudieron hacer los Patxi Salinas, Eusebio, Sánchez y Gudelj para romper el maleficio. Esta temporada, la 1995-96 será recordada como la Liga de los 22 tras readmitir a Celta y Sevilla en la competición, equipos que se habían olvidado de cumplimentar los avales.
A este día no se escapó  ni el Celta de Cavallero, Mostovoi, Karpin y Catanha, era el año 2002 y el Celta volvería a caer ante el Espanyol, esta vez por 2-0 con goles de Palencia y Tamudo. Este equipo acabaría la Liga en quinta posición con 60 puntos, una de las mejores campañas de su historia, pero el día 7 de abril se volvió a interponer a los intereses celestes.
Y el último partido que el Celta ha tenido que sufrir en tan funesta fecha fue en el curso 2012-2013, la liga del 4%, una temporada que quedará marcada a fuego en el imaginario celeste, el equipo comandado por Abel Resino perdía por 0-2 ante el Rayo Vallecano quedándose al borde del abismo con 24 puntos en la jornada 30. Aún quedan integrantes del último Celta que sufrió la maldición del 7 de abril en el actual equipo, Mallo, Jonny, Cabral, Sergio, Rubén, Orellana y Aspas, jugadores que seguro no querrán volver a jugar un día como este.
 

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