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Celta de Vigo
1-0
Málaga Club de Fútbol

Nolito arrebata la quinta plaza al Athletic

Alberto Bravo

El Celta cumplió con su parte, con un partido escaso en juego logró llevarse los tres puntos ante un Málaga que quiso aguarle la fiesta a los vigueses el día que celebraban su vuelta a Europa. El Athletic no cumplió con su parte  los de Berizzo se colocan quintos a falta de visitar a un Atletico que  no se juega nada en la última jornada. Poco fútbol, pero jornada redonda.

Las novedades en el once de Berizzo eran la inclusión de Mallo como central, algo esperado y la entrada en la meta de Rubén Blanco, que en este tramo final de liga está jugando más partidos que Sergio. En medio campo se apostaba por mayor movilidad con Wass acompañando a Marcelo y arriba volvía a repetir con la tripleta Orellana, Aspas, Nolito dejando de nuevo a Guidetti, a la espera de una oprtunidad, en el banquillo.
Primera mitad de menos a más. el Celta salió dominando, la pelota era suya y el Málaga esperaba atrás, un clásico de los partidos de Balaídos. Los de Berizzo sobaban el balón pero este se movía lento, sin profundidad hasta el minuto 12 donde el Tucu desperdició una ocasión clarisima para ceder la pelota a Aspas. Mala decisión del chileno que optó por lo más complicado cuando estaba completamente sólo.
Este fue el primer aviso de un Celta que poco a poco iba apretando en la presión, las oportunidades de gol se iban sucediendo aunque no eran tan claras como la del Tucu, avisaron Jonny y Aspas hasta que Nolito, en el minuto 31 logró abrir la lata malagueña. Una jugada del tridente celeste iniciada por Aspas, acabó con un centro de Orellana para que Nolito, dentro del área chica empujase el balón.
Con el tanto el Málaga se despertó de su letargo, Recio tuvo una buena ocasión de falta, pero Rubén, atento, desvió el tiro que iba muy pegado al palo corto. Nolito pudo anotar el segundo a falta de 5 minutos para el descanso pero esta vez Ochoa sí pudo evitar el tanto celeste, tal vez hubiese sido un castigo excesivo para los méritos de los olívicos que jugaron una primera parte a medio gas.

Tedio y poca tensión en la segunda mitad

La lluvía recibió a la segunda mitad. Una tromba de agua que podía empañar las celebraciones posteriores en Plaza América. Curiosamente se adaptaron mejor los andaluces al agua, hasta tres ocasiones tuvieron los de Gracia al comienzo de la reanudación con Atsu y Camacho de protagonistas. Al Celta le costaba mantener el control del partido, pero apenas sufría debido a la poca efectividad  visitante. La primera aproximación del Celta tardó 24 minutos en llegar, un remate de Jonny que se fue desviado.
Sólo un minuto después Aspas despertó a un somnoliento Balaídos, el de Moaña se volvió a inventar una vaselina genial, pero Ochoa realizó una parada  espectacular, tan buena como el remate del delantero celeste. Pero el partido volvió a decaer, siendo Guidetti el protagonista por su calentamiento en banda. Gracia buscó el empate con la entrada de un casi inédito Uche, Berizzo respondía con el cambio de Guidetti por Aspas. 
Camacho desperdició otra ocasión en el minuto 36, el mediocentro remató muy flojo dentro de área y Rubén atajó sin problemas. Pasaban los minutos sin que sucediese nada relevante en partido hasta que Guidetti falló lo imposible. Tras un gran desmarque el sueco se plantó sólo ante Ochoa e inexplicáblemente la mandó a las nubes. El Málaga era el único que quería estropear la fiesta celeste, Duda buscó el empate en el descuento, antes Orellana se había retirado entre los aplausos de la afición. Hasta ahí llegó el partido, el Celta cumplió con su parte, los bilbainos también por la parte que le tocaba a los vigueses, lo mismo que el Atlético por lo que en la última jornada el los de Berizzo podrán certificar una quinta plaza que hace unos días parecía imposible.
 

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