El Celta ha informado este jueves por la tarde que los abonados de la grada de Río deberán ver el debut en la Europa League de su equipo en el estadio de Balaídos frente a Panathinaikos (jueves 29 de septiembre a las 19.00 horas) en un lugar diferente al habitual. Y es que el club celeste se ve obligado a reubicar a los socios del citado lugar, unos 500, debido a unas exigencias de la UEFA que debe cumplir.
Según ha indicado la entidad olívica a través de su página web oficial, la normativa de la Europa League exige la existencia de una zona reservada a palco y patrocinadores en un graderío cubierto y, puesto que a día de hoy no existen estas condiciones en la grada de Tribuna, donde inicialmente estaban previstas las plazas, se deberá acotar parte de Río a tal fin.
También ha avisado el Celta de que los abonados afectados serán informados de manera personalizada de esta situación y se reubicarán conjuntamente con ellos para este partido. "El club ruega que disculpen las molestias que puedan ocasionar estas medidas originadas por unos hechos ajenos a nuestra organización", ha expresado.
Por ultimo, informa que la reglamentación de UEFA y LFP obliga también a reubicar en la grada a los medios de comunicación situados hasta ahora en cabinas, cuya función será modificada para ajustarse a la normativa.