Es Noticia

"A Rianxeira" vuelve a sonar en Europa

Marci Varela

Había un ambiente especial en Balaídos; se notaba que se jugaba un partido de competición europea. La entrada (15.726 espectadores) no fue del todo mala para la hora del encuentro y los aficionados del Celta sabían que su apoyo debía notarse más que nunca para que llegase a los jugadores. Por eso, en los minutos previos al inicio del choque, el estadio vibraba con los cánticos de los hinchas. 

A pesar de que el juego de su equipo no fue bueno, los seguidores celestes estuvieron especialmente generosos en el aplauso y en contadas ocasiones recriminaron un fallo a un futbolista. La "paz" solo se rompió durante el instante en el que se escuchó: "Mouriño atende, o Celta non se vende". Sufría el equipo vigués y el gol del Panathinaikos parecía cuestión de tiempo.
A falta de un cuarto de hora para el final del partido, la afición despertó y comenzó a jalear a su equipo como en las grandes noches europeas, aunque fueran menos las gargantas presentes en Balaídos. Como por arte de magia, el empujón de la afición unido a la salida de Iago Aspas desencadenó un arreón final celeste. El tanto de Guidetti en el minuto 83 fue el pistoletazo de salida de la fiesta en las gradas. 
De los cánticos a favor del sueco se pasó "A Rianxeira" y después al "Miudiño". Balaídos se divertía y Wass ponía el colofón con el segundo gol del Celta. Durante 90 minutos, la afición se olvidó de las incomidades obras de Balaídos o el "maltrato" a los abonados. Era una noche de fiesta que se cerró con el himno cantado a capela.

29 de septiembre de 2016

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar