Venganza celeste en un choque completamente loco

Locura en Balaídos, en un partido trepidante el Celta logró la machada de vencer al Barcelona y a un Vicandi Garrido que señaló un penalti, que en directo no parecía, a favor de los azulgranas, y perdonó el juego duro de los de Luis Enrique. 15 minutos de juego exultante celeste llegaron para conseguir una renta de tres goles con la que sobrevivir a una segunda mitad de infarto. 4-3, quinta vez que el Celta vence de forma consecutiva al Barça. Quién dijo miedo, el Celta volvió a mostrarse como un grande.

Tras ganar al Panathinaikos el Celta quería cerrar su semana mágica derrotando a todo un Fútbol Club Barcelona. Para ello Berizzo sacaba el mejor once posible pensando en las energías que les quedaban a los suyos tras un agotador mes de septiembre. Roncaglia volvía al costado zurdo, Radoja entraba por el Chelo y arriba el técnico argentino colocaba a Iago por el centro con Bongonda y Sisto en las bandas.
Salió un poco dormido el Celta al partido, sin que se hubiese pasado un minuto Neymar tenía la primera en una absurda falta cometida en la frontal. Los primeros compases del choque eran para los azulgranas, a los celestes no les duraba la pelota más de dos pases. Sin generar grandes ocasiones los de Luis Enrique se sentían superiores. Ese dominio les duró 10 minutos, lo que tardó el Celta en tomarle el pulso al choque. Poco a poco la pelota iba adquiriendo un claro color azul celeste. Bongonda iba descosiendo a Sergi Roberto pero era Aspas el que estaba más entonado.
Un pase suyo destrozó a la defensa culé en el minuto 21, el de Moaña encontró el hueco en la zaga para habilitar a Sisto. El danés con una perfecta ejecución al segundo palo inauguraba el festival celeste. Sólo dos minutos después, en el 23, Aspas, con un potente disparo probó a Ter Stegen, el alemán, con ciertos problemas, la despejó a córner. Seguía dominando a placer el Celta y Aspas en el 31 ponía el 2-0. El atacante celeste, atento al fallo de la defensa barcelonista, cogía la pelota en mediocampo, se lanzó a por la meta del alemán y desde fuera del área, con un ajustado disparo, llevó el éxtasis a Balaídos.
Sin tiempo a asimilar el tanto de Aspas llegó el tercero. Alba se equivoca, y Mathieu muy forzado aloja la pelota con su despeje en la meta de Ter Stegen. En 12 minutos el Celta había desarbolado al Barça con 3 goles. Mallo pudo anotar el cuarto, pero su tiro con rosca al segundo palo, no adquirió mucha potencia. Aspas era una pesadilla para la defensa de Luis Enrique y sólo se le podía parar con multitud de faltas. El Barcelona tardó en asimilar los golpes y no se supo nada de él en el resto de la primera mitad. 3-0 al descanso con una afición entregada.
La segunda mitad comenzó de la misma manera. Un Celta respondón que no se conformaba con la renta conseguida buscaba el cuarto tanto entre los oles de los aficionados celestes congregados en Balaídos. Pero el Barcelona se encontró con un gol en el minuto 57. Centro de un Iniesta que había sustituido a un desaparecido Rafinha que cabecea completamente sólo Piqué. Con el 3-1 llegaban los primeros agobios a Balaídos.

Vicandi Garrido señala penalti sobre Gomes

Berizzo quería guardar el resultado y metió a Marcelo por Bongonda, pero sólo 5 minutos después del tanto de Piqué el colegiado vasco Vicandi Garrido señalaba un complicado penalti sobre André Gomes, las repeticiones darían razón al colegiado, ya que en directo no se apreciaba contacto. Neymar fue el encargado de lanzarlo y sin los alardes de la temporada pasada en el Camp Nou dejaba la ventaja celeste en un gol. Esta vez no hubo lambrettas, ni penaltis en asistencia diferida. Tocaba sufrir.

La pifia de Ter Stegen

Tocaba sufrir pero Ter Stegen decidió lanzar un flotador al Celta, el alemán buscó un pase a su banda izquierda, pero el Tucu estaba muy atento y de un cabezazo anotaba el cuarto para tranquilidad de una hinchada que tenía el corazón encogido. Otro fallo del Barça del que se aprovechaba el Celta. Aspas pudo hacer el quinto, en una contra llevada de forma magistral, falló con un remate muy mordido cuando ya estaba plantado enfrente de Ter Stegen.
El cuarto tanto celeste y el carrusel de cambios afectaron al ritmo del encuentro. El Barcelona buscaba un milagro en forma de dos goles, pero Berizzo apostó por reforzar su once con la entrada de Jonny. Piqué volvió a enmudecer a Balaídos con su segundo tanto, los culés se ponían 4-3 y en el 87. Neymar tuvo el empate en el 90 tras un centro de Denis, pero su cabezazo se fue fuera para alivio local. Apretó más el Barcelona, pero aguantaron los celestes en una segunda parte completamente loca. Triunfo de prestigio para un Celta que va lanzado en estas últimas semanas.