Las rotaciones las carga el diablo
El pésimo planteamiento de Berizzo le dio una ventaja al Eibar que no desaprovechó. Fran Rico hizo el gol del triunfo local en una acción que evidenció el fracaso de la alineación del míster argentino. A pesar de la malísima primera parte, los cambios en el tramo final reactivaron al Celta y Munuera Montero no señaló un claro penalti sobre Bongonda. Como ocurrió en Ámsterdam, no sacar un once competitivo restó muchas opciones de puntuar al cuadro gallego.
El cambio masivo de jugadores y la presencia de Hugo Mallo como mediocentro provocó que el equipo vigués comenzase desenfuchado el encuentro. Todo lo contrario que el conjunto armero, que aprovechó la caraja defensiva celeste. Una indecisión entre los centrales la aprovechó Sergi Enrich para probar los reflejos de Rubén Blanco. Al remate del delantero le faltó colocación. Fue el avisó antes del gol. A los diez minutos de juego, Fran Rico caza un rechace tras un cabezazo de Adrián al larguero y fusila al guardameta ante la pasividad defensiva celeste.
Viendo el pésimo arranque de su equipo, Berizzo quitó a Hugo Mallo del medio y lo puso de carrilero derecho para formar una defensa de cinco. Esa modificación no frenó a un Eibar que hacía mucho daño por las bandas. Un balón colgado al área desde la izquierda acabó con un despeje de Sergi Gómez que salió rozando el larguero. El primer tiro del Celta llegó en el minuto 20 con un potente chut lejano de Señé que detuvo Riesgo sin problemas. Los vigueses estaban sin ideas para encontrar el gol. La circulación era lenta y faltaba fluidez en el centro del campo.
Al filo del descanso, Señé le puso el tanto en bandeja a Bongonda, que falló en el mano a mano contra Riesgo. El belga volvió a demostrar su nula pegada. En la primera acción de calidad, el conjunto celeste consiguió hacer daño a la defensa vasca. Nada más iniciarse el segundo tiempo, Adrián se inventó un latigazo que se estrelló en el larguero. El excéltico estaba de dulce y, tras una pared con Sergi Enrich, puso de nuevo contra las cuerdas a Rubén. El mosense supo despejar el tiro del madrileño.
Sorprendentes sustituciones
Pese a ir por debajo en el marcador, Berizzo apostó por mantener la defensa de cinco y meter a Pablo Hernández por Wass. La entrada del 'Tucu' apenas surtió efecto en un segundo tiempo marcado por las imprecisiones de ambos conjuntos. La segunda sustitución del técnico argentino también fue de hombre por hombre. Señé, el jugador más activo en ataque del Celta, salió del césped por Pione Sisto. El danés le dio aire fresco a la banda izquierda y casi provoca un penalti nada más entrar. Hubo que esperar al tramo final para que el 'Toto' quitase a un defensa para dar entrada a Guidetti.
El Eibar se olvidó del juego combinativo y se centró en defender el resultado. En una indecisión defensiva local, Bongonda se plantó de nuevo ante Riesgo y justo después de tocar el balón, el portero lo derriba. Las protestas celestes no surtieron efecto en Munuera Montero, que no quiso pitar la pena máxima en una acción muy polémica. El cuadro armero se sacudió la presión con un testarazo de Adrián que obligó a lucirse a Rubén Blanco. Los últimos minutos tuvieron como protagonista al colegiado, que expulsó a Sergio por protestar sus decisiones. El árbitro desquició por completo al Celta y Hugo Mallo fue expulsado con el encuentro terminado. Derrota con muchas secuelas para el próximo choque de Liga contra el Granada.
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