Mouriño: "Nos permiten jugar en Balaídos, pero nada más"

Así de rotundo se mostró Carlos Mouriño en la comparecencia en el Club Financiero de Vigo, el presidente del Celta sostiene que para que el club mantenga su arraigo con Vigo necesita proyectos reales, la compra del Estadio de Balaídos y la construcción de una Ciudad Deportiva, ya que para el máximo mandatario celeste, "el Celta no tiene arraigo en la ciudad, solo lo hay sentimental, no hay más, y este se muere".

 
Esa es la tesis con la que Carlos Mouriño busca convencer a la opinión pública viguesa de la necesidad que tiene el Celta de aumentar su patrimonio para garantizar un futuro para la entidad olívica. A pesar de que las leyes impiden la venta de un bien público de interés general como el estadio de Balaídos el presidente sigue insistiendo en su compra, "que nos den un permiso para hacer un estadio o una ciudad deportiva", solicitaba Mouriño.
"Queremos que al Celta no se le corten las alas", aseguraba mientras reconocía que la compra de Balaídos "no sé si será legal, pero yo creo que es una cuestión de voluntad política", ya que entiende que se pueden encontrar soluciones para que el Celta pueda adquirir y explotar el estadio municipal. Mouriño confesaba que para él el Celta no disfruta de Balaídos, "¿para que necesita el Celta el estadio si ya lo dispone?, es mentira, jugamos en él, pero no disponemos de él". Como ejemplos puso la negativa a que se celebrasen conciertos como el de Mana, en el 90º aniversario del club o uno de U2 en el Xacobeo.
Otro ejemplo que puso para explicar que el Celta no dispone de Balaídos es la reforma de la grada de Tribuna, "se va a inaugurar la grada, pero dónde está la tienda y la cafetería, no nos han dado los permisos", por lo que su sentimiento es que "nos permiten jugar en Balaídos, pero nada más", indicó el presidente del Celta. Para ello puso los ejemplos del campo del Betis que fue vendido a la entidad heliopolitana por el ayuntamiento de Sevilla o la venta de los terrenos de la Peineta al Atlético de Madrid.
Y en la búsqueda de ese arraigo lanzó la posibilidad de construir otro estadio fuera de Vigo, "buscamos el arraigo, si yo quiero quedarme en el Celta es con un proyecto de futuro, en Vigo o en otra parte cercana. Si me dan el terreno fuera de Vigo, Nigrán, Porriño, Mos, no nos debería de asustar, pero mi primera opción es Vigo", aseguró Mouriño dejando abierta la posibilidad de abandonar Balaídos si no se produce la compra por parte del Celta.