Royalverd asegura que el Celta escogió una opción más barata

La situación actual que vive el Celta con el césped de Balaídos se ha enquistado más todavía tras salir a la luz una pelea de cifras y servicios contratados entre el club y la empresa encargada de la sustitución. Desde la empresa encargada de realizar el cambio, Royalverd, se ha apuntado como causa al mal estado del campo a que el Celta optó por una opción más económica en la que solo se acordó la renovación del tapete por 120.000 euros, sin servicio de mantenimiento posterior. Algo que el conjunto celeste ya ha desmentido a ElDesmarque Vigo.

El Celta asumió los costes del cambio del verde del estadio en el invierno pasado tras acordarlo con el Concello de Vigo. Este se llevó a cabo a mediados de enero y hasta el momento había trascendido que el conjunto celeste se había gastado 380.000 euros para la sustitución. Pero, tal y como informó Onda Cero Vigo, la empresa encargada de realizar la sustitución habla de únicamente 120.000 euros.
Esta cuantiosa diferencia respondería a los servicios contratados. Royalverd asegura que el Celta solo contrató el cambio del tapete, sin tratamientos posteriores en los que se incluirían una serie de soluciones técnicas destinadas a preservar el campo. El club, por su parte, defiendó a ElDesmarque Vigo que el total que el cambio de césped costó 180.000 euros, que el club paga una cuota de mantenimiento mensual de 13.000 euros y que los costes totales están por encima de los 460.000 euros en estos momentos.
El propio Mouriño dedicó unas palabras sobre el mal estado del campo en el desayuno informativo del lunes y aseguró que le exigiría a la empresa un nuevo césped si no consiguen arreglar la situación actual, algo que sería harto difícil si la contratación fue exclusivamente para la sustitución del verde, sin incluir mantenimiento alguno. Royalverd ya ha advertido que el césped de Balaídos tiene "mala solución" y asegura que están actuando por encima de lo que le corresponde. Puso como ejemplo las lámparas de rayos uva que se instalan tras los partidos, que el Celta, según su versión, no ha contratado y que sin embargo la empresa ofrece sin coste adicional.
Balaídos se ha convertido en un enemigo esta temporada. El estado del césped es muy preocupante desde que llegaron las primeras lluvias de la temporada y un foco de problemas para la escuadra de Berizzo. Por un lado, el propio técnico reconoció que el estado del terreno dificulta que el equipo desarrolle el juego deseado y por otro está el riesgo de una lesión por culpa del césped. Mouriño explicó este lunes que Royalverd "está estudiando lo que le pasa" y el Toto había indicado días atrás que las causas del problema estarían en la acumulación de aguas subterráneas y que su solución era muy difícil. 
La realidad es que el Celta tiene actualmente al enemigo en casa. Las jornadas pasan y el verde de Balaídos cada vez presenta peor aspecto a pesar de que las humedades y las aguas subterráneas ya era algo con lo que convive desde hace décadas, pero que en este último cambio de tapete se ha sufrido mucho más de la cuenta. Además, la empresa contratante pocas veces había tenido tantos problemas con un recambio, y eso que cuenta con experiencia en otros campos de Primera como el Camp Nou, Riazor, Benito Villamarín y campos emblemáticos como Maracaná. 
El Celta incluso habla de presiones por parte de la empresa Royalverd para instalar un césped híbrido tal como informa la cuenta de Twitter de Onda Deportiva Galicia Sur. A última hora de la tarde, el mismo medio confirmaba que había tenido acceso a los documentos del cambio y éstos confirmarían la versión del Celta.