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El uno a uno de la derrota del Celta ante el Betis

Nacho Vizcaíno

El Celta fue casi irreconocible ante el Betis, especialmente en la primera parte. El cuadro de Berizzo estuvo terriblemente apático: apenas presionó al rival, se mostró muy falto de ideas y dejó hacer demasiado al cuadro andaluz. El resultado fue una primera parte de asedio bético, con el club vigués encerrado en su campo y sin apenas generar peligro. El 'Toto' probó con el 4-4-2 con un centro del campo en rombo con Jozabed de enganche y una doble punta formada por Guidetti y Bongonda para contrarrestar la defensa de cinco de Sánchez del Amo, sin mucha suerte. Los vigueses demostraron algo más de actitud en la segunda parte, pero aún así rindieron a un nivel muy inferior de lo que cabría esperar.

Sergio (7): Le tocó remendar la pasividad de sus compañeros. Empezó enchufado despejando un centro-chut envenenado de Joaquín y fue capaz de despejar cada disparo del Betis en una primera parte terriblemente apática del Celta. En la segunda mitad apenas tuvo trabajo y no pudo hacer mucho más en la jugada del gol. Brasnac remató de cabeza libre de marca y en la peor posición para un portero: lo suficientemente lejos del área pequeña para que salir a por el balón fuese un riesgo excesivo. 
Lemos (5): Sufrió en los compases iniciales ante las arremetidas de Joaquín. El Betis encontró por su banda la forma más cómoda de alcanzar el área celeste y necesitó las ayudas constantes de Radoja y Jozabed. En la segunda parte se mantuvo las llegadas andaluzas por su banda, no pudo frenar ninguna. Adelantó su posición con el 0-1 y apareció algo en ataque, aunque sin mucho acierto.
Roncaglia (6): Tuvo un par de cortes claves en los primeros compases del encuentro. Volvió a realizar un trabajo duro, especialmente ante Dani Ceballos. En la segunda mitad fue el hombre de cierre y no fue capaz de frenar a la delantera bética tanto como quisiera.
Sergi Gómez (6): El central estuvo bastante sólido en su faceta. Consiguió molestar en los remates a puerta que llegaron en su posición y le facilitó el trabajo a Sergio.
Planas (6): Empezó el choque con ganas de subir la banda y sirviendo un gran centro a Guidetti en los primeros minutos. Tuvo un partido apacible ya que el Betis buscó hacer daño siempre por el centro o por la derecha, apenas probó al lateral catalán. Se tuvo que retirar lesionado por una patada tan dura como involuntaria de Dani Ceballos. Erró al intentar tomarse la justicia por su cuenta al realizarle una entrada desmedida en la jugada siguiente, antes de irse al banquillo.
Radoja (7): Joaquín empezó haciendo mucho daño al Celta y Berizzo le encargó a los quince minutos que se encargara de anular al andaluz. No se volvió a ver al veterano jugador andaluz gracias al trabajo del serbio con un marcaje al hombre muy intenso que le llevó a jugar casi de lateral derecho por momentos. En la segunda parte, Radoja recuperó su posición habitual y quedo relevado de ese marcaje. A los diez minutos Joaquín ya había conseguido dar la asistencia en el primer gol visitante.
Chelo (5): Le tocó hacer el cierre defensivo desde que Radoja se dedicó a perseguir a Joaquín. El equipo apenas notó su batuta ya que funcionó a base de arreones y balones en profundidad, sin ninguna intención de hacer circular la pelota por el centro del campo como está acostumbrado. Liberado de estas tareas, se le vio menos de lo deseado en tareas de elaboración, siempre estuvo más pendiente de la marca que de construir.
Pape Cheikh (6): Después de unos primeros minutos errantes de todo el equipo, se pegó a Ceballos e intentó hacerle la vida imposible. Le faltó un poco más de presión sobre su pareja para intentar recuperar el balón. Se contagió de la apatía general en la primera parte, en la segunda comenzó mucho más enchufado, pero sin apenas incidencia. Berizzo le relevó del marcaje de la primera parte y el equipo le echó de menos.
Jozabed (7): Tomó el rol de enganche, por detrás de la dupla de delanteros pero no por ello dejó de aparecer en tareas defensivas. Volvió a ser omnipresente y fue uno de los hombres que más kilómetros recorrió en el cuadro celeste. Lamentablemente para el Celta, se le vio más sobre la frontal del área local recuperando balones que en campo contrario. Pero cuando el cuadro celeste generó peligro, ahí estuvo el andaluz.
Guidetti (6): Recuperado de su gripe, salió al campo con ganas de liderar el ataque celeste. Estuvo activo y guerrero desde el minuto uno, dejando detalles de gran calidad como un taconazo a Bongonda que el belga no pudo aprovechar por estar en fuera de juego. Casi no tocó el balón por culpa de una excesiva pasividad de sus compañeros y se le vio frustado por ello. A la primera oportunidad, puso en apuros a Adán
Bongonda (4): Berizzo adelantó que el jugador disputaría el encuentro en una posición más cómoda para el, como segundo punta. Vivió al límite del fuera de juego y terminó en posición irregular en demasiadas ocasiones. Terminó ajustando su posición ligeramente escorado a la banda derecha para ayudar en tareas defensivas en esa banda, aunque no tuvo demasiada incidencia en este aspecto. Desaprovechó un mano a mano muy claro ante Adán tras un error clamoroso de la defensa del Betis. Volvió a haber pitos para el jugador.
Beauvue (6): Suplió a Guidetti como el hombre de referencia y le pasó tres cuartos de lo mismo que al sueco: apenas vio el balón. Aún así, cuando lo hizo siempre consiguió sumar en ataque.
Jonny (7): Le tocó salir sin calentar ante la lesión de Planas y eso nunca es fácil. Como le pasó al catalán, apenas tuvo trabajo en tareas defensivas. Sin embargo, en ataque estuvo muy activo: la primera vez que tocó balón en ataque consiguió sacar una amarilla a Bruno y consiguió servir varios centros peligrosos.
Wass (7): El que no bajó los brazos. Entró en la recta final y mientras todo el equipo parecía estar asumiendo la derrota, el danés seguía insistiendo en generar peligro sobre la portería de Adán. Lo intentó de mil maneras, pero la defensa bética supo pararle.
Berizzo (6): Probó un dibujo diferente. Cambió el 4-3-3 por el 4-4-2, con un centro del campo en rombo y Jozabed como enganche para contrarrestar la defensa de cinco hombres del Betis. Tuvo atino a la hora de retocar el dibujo tras unos primeros quince minutos de asedio bético especialmente al decidir que Radoja y Pape intercambiaran emparejamiento. Tras el paso por vestuarios volvió a retocar al equipo y supo motivar a sus jugadores, que salieron con una actitud distinta a la de la primera parte e intentó hacer un dibujo más reconocible. No le salió del todo bien.
 
 

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