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Las 5 imágenes que el celtismo nunca quiso ver

María Naranjo

Este jueves en Old Trafford hubo muchísimas imágenes que se quedarán para siempre grabadas en la retina del celtismo. La lucha del Celta, el gol de Roncaglia, la ocasión de Beauvue y Guidetti en el último minuto, el regreso al campo tras la eliminación, los cánticos incesables desde la grada de visitantes completamente teñida de celeste, el orgullo de unos jugadores que miraban a sus seguidores pidiendo perdón,... Pero también hay muchas otras que desearía no recordar. Aquí te traemos cinco ejemplos:

 

Las lágrimas celestes


La plantilla del Celta no pudo evitar romper a llorar cuando sintieron y escucharon a los aficionados celestes que ocupaban la grada de visitantes del 'Teatro de los sueños' sin dejar de aplaudir y cantar al finalizar el partido. Saladas lágrimas de impotencia ante una situación en la que se supieron superiores pero ni el gol ni la fortuna acompañaron.


El cabezazo de Marouane Fellaini en el minuto 17 de la primera mitad dio alas a un Manchester que salió apagado al encuentro, completamente dominado por el Celta hasta ese momento. Rashford abandonó la posición de nueve para transitar hacia las de interior y desde allí colocar un balón diagonal hacia el segundo palo, una suerte de puerta atrás para un especialista como Fellaini, que cabeceó a la red tras dejara atrás a su marcador Hernández, sin ayudas.


La segunda parte del encuentro fue un antifútbol del equipo dirigido por Jose Mourinho. Una tangana justo en la siguiente jugada al gol de Roncaglia, que fue aclamado como un héroe por los aficionados reunidos en Old Trafford y que provocó la expulsión del argentino por el colegiado rumano al mismo tiempo que Bailly, que propinó un puñetazo en la cara a John Guidetti. Imágenes lamentables que dejaron los últimos 8 minutos de la histórica semifinal.

 

Mourinho celebró así el final del partido y su posterior clasificación para la final de la Europa League tras vencer al Celta por un cómputo global de 2-1. El técnico luso quiso felicitar a la afición celtista por su comportamiento y reconoció la superioridad del conjunto celeste sobre los 'red devils'. Se llevó algún improperio por parte de los hinchas celestes. 


En el último minuto de los 6 de añadido que indicó el colegiado rumano, un balón en largo desde el campo celtista le llegó a Beauvue en el interior del área. El francés la condujo y, cuando estaba delante de Romero, en lugar de rematar a portería, se la puso a John Guidetti que llegaba en carrera por detrás desde el lado izquierdo. El sueco no la esperaba y el balón acabó saliendo por encima de la meta del Manchester. Se lamentaba el ariete del Celta al final del encuentro de la ocasión desperdiciada que pudo haber supuesto la clasificación celtista para la final de la Europa League.
 
 
 

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