Tablas en O Noso Derbi, un partido aburrido y sin tensión que entierra cualquier opción del Celta de jugar en Europa la próxima temporada. Un duelo marcado por la falta de tensión y juego donde lo más interesante sucedió en las gradas, donde la afición celeste recordó al Deportivo que a partir del 20 de mayo son un equipo de Segunda.
Poco tardó el Celta en demostrar que los 17 puntos de ventaja existentes en la tabla son la diferencia real que hay con su eterno rival, al menos cuando quiso jugar al fútbol, poco este sábado. Con un Balaídos de fiesta, olvidando la decepcionante temporada de los de Unzué, el equipo salió con ganas de ratificar que el fútbol gallego sólo tiene un color, el celeste.
El drama deportivista en la portería, cinco metas en una temporada, algo casi inédito en un equipo de Primera División daban paso al primer gol vigués en O Noso Derbi. Rubén salió en falso a por el balón y Maxi Gómez, de espaldas a la portería, ponía en el primer tanto del choque en el minuto 13.
Sin fútbol sobre el césped la fiesta proseguía en las gradas de Balaídos con Luisinho como principal foco de las mofas viguesas: "Balón de Oro, Luisinho Balón de Oro" retumbaba en el vestusto coliseo olívico mientras Maxi Gómez recortaba a Schär, dejándolo en el suelo, para estrellar su remate en el pecho de Rubén.
Guilherme, pasados los 35 minutos, dispuso de la primera gran ocasión para un Deportivo que intentaba igualar fuerzas pero que mostraba todas sus carencias sobre el césped. El brasileño probó la agilidad de Sergio con un potente disparo desde 20 metros al que respondió 'O Gato' mandando el esférico a córner. Nada más pasó en los primeros 45 minutos de un derbi sin tensión ni juego en el campo.
El Dépor regresó con una marcha más en su juego lo que permitía a los de Seedorf acercarse con cierto peligro a la meta de Sergio. Un gran centro de Juanfran hacia Lucas Pérez se encontró con la milagrosa cabeza de Sergi Gómez, tardaban los de Unzué en reaccionar.
Pione Sisto, como sucedió con Guilherme en la primera mitad, buscó el tanto desde fuera del área. Tardó casi 60 minutos en coger temperatura O Noso Derbi, una entrada a destiempo de Maxi Gómez acabó con la vendetta de Schär segundos después. Una dura entrada del suizo que acabó en una tangana donde Mallo acabó viendo la amarilla. La hinchada se calentaba y redoblaba su "A Segunda oe".
Maxi Gómez, renqueante desde el viernes, dejó su sitio a Boyé en el minuto 62 con el trabajo hecho. El argentino gozaría de media hora para dejar su huella en el Celta. El Celta sólo le puso ganas unos minutos, lo necesario para marcar el segundo en una buena jugada coral de todo el equipo. Pero Del Cerro Grande anuló el tanto de Wass por fuera de juego, acertando en su decisión.
El Deportivo buscó darle una pequeña alegría a su afición en un arreón final donde un centro de Borja Valle a Andone fue abortado por Sergio. La Ola aparecía en las gradas, también A Rianxeira; pero nadie se imaginaba que en el minuto 90 Lucas Pérez lograría el tanto del empate que ponía el cierre a una temporada decepcionante para el Celta y terrible para el Deportivo. Ni Europa, ni O Noso Derbi, el Celta ha cerrado la temporada hace semanas y ha privado a su afición de una victoria ante el eterno rival, un Deportivo que ya llegó descendido a Balaídos.
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