Miguel Cardoso se mostró relativamente satisfecho de la puesta en escena de su Celta en Anoeta. Para el técnico luso los tantos de Oyarzabal y Januzaj son el factor diferencial del duelo ante la Real Sociedad: "Dos goles brutales, de una calidad increíble hicieron la diferencia", resumió.
"Estuvimos en el partido desde el principio hasta el final", analizó el luso que cree que se hizo un "partido con cosas muy interesantes" para el poco tiempo que lleva el equipo practicando su idea de juego: "Nosotros llevamos preparando el partido desde hace tres semanas y hemos dado una buena respuesta".
Estas tres semanas al frente del Celta las comparó con un Garitano que lleva desde la pretemporada dirigiendo a la Real: "Ha dicho muy bien que empezó a preparar este partido en agosto", para esgrimir que a su Celta le queda "mucho camino".
Cardoso lanzó un mensaje de optimismo porque tiene la "certeza de que estamos haciendo las cosas bien, que el juego va cambiando". A pesar del tanto de Oyarzabal para el portugués "los primeros 20 minutos" fueron buenos, no tanto el resto de la primera mitad donde confesó que "la defensa tenía problemas para salir".
El míster se negó a admitir que la ausencia de jugadores de tanto peso en el equipo dejase un mensaje de que se buscaba tirar la Copa: "Teníamos la intención de ser competitivos. En mi plan no estaba dar más valía a una competición que otro. Había jugadores que no habían jugadores y había que darles energía"
Lo que sí quiso dejar claro es que en estos momentos no ve a la plantilla del Celta capaz de jugar tres encuentros consecutivos: "En un futuro seremos capaces de pelear igual manera en la mitad de semana y en el fin de semana", concluyó Cardoso.