Iago Aspas estará en el trascendental duelo ante el Barcelona donde el Celta se jugará buena parte de sus opciones de salvación. El moañés tendrá que infiltrarse para aguantar el dolor producido por el esguince de su hombro derecho, por ello, esta mañana de viernes, al comenzar el entrenamiento, reconoció que "podía estar mejor".