La idea del nuevo entrenador del Celta de Vigo, Óscar García Junyent, que el sábado debutó con derrota ante el Barcelona (4-1) en el Camp Nou, de abrir las sesiones de entrenamiento de la próxima semana se queda a medias. Porque aunque estaba previsto que fueran cuatro días, finalmente serán tres abiertos para el público.
La plantilla celeste se ejercitará en las instalaciones deportivas de A Madroa por la mañana, mientras que los días de doble sesión -martes y miércoles- los entrenamientos vespertinos serán abiertos para los aficionados y periodistas. Una semana para corregir errores y seguir dando instrucciones del nuevo estilo de juego del Celta. Los aficionados celestes podrán ver las evoluciones de sus jugadores el lunes, martes y miércoles (estos dos días, sólo por la tarde).
Óscar García dispone de dos semanas para preparar el próximo partido de Liga contra el Villarreal, que su equipo disputará de nuevo a domicilio. El técnico celeste no podrá contar con los futbolistas que viajaron con sus selecciones: Fran Beltrán (España sub 21), Lobotka (Eslovaquia) y Okay Yokuslu (Turquía).
Una medida que va a gustar a los aficionados del Celta, al menos que durante una mañana pueden apoyar a sus jugadores en el entrenamiento.