Celta de Vigo y RCD Mallorca protagonizan este domingo un duelo de necesitados en Balaídos, el cuadro bermellón, el peor visitante de toda LaLiga Santanderbuscará aguar la fiesta a un Celta que es capaz de resucitar muertos en su estadio. El Celta, por su parte, buscará un triunfo que le saque de los puestos de descenso y permita a los de Óscar García Junyent sumar su primer triunfo como locales desde que el técnico catalán se ha hecho cargo del banquillo vigués.
Tras la dura derrota frente al Leganés en Butarque, donde el Celta exhibió la peor cara de la etapa Óscar García Junyent, el equipo vigués encara sin margen de error la visita del Mallorca, que suma siete derrotas en los siete partidos que ha jugado fuera de Son Moix. El partido ante el Leganés ha dejado muy tocados a jugadores como Rafinha, Santi Mina o Denis Suárez.
Los protagonistas de la llamada 'Operacion Retorno' no ha resuelto el mayor problema del Celta desde la salida de Eduardo Berizzo: la falta de competitividad e intensidad en los partidos. Este es el gran reto que tiene por delante Óscar García, hacer del Celta un equipo intenso, con garra, que no se deje llevar y busque la victoria desde el primer minuto de cada encuentro.
Para el duelo ante el Mallorca Óscar García retocará de nuevo su once inicial tras la revolución fallida de Butarque. Allí dejó en el banquillo a Pione Sisto, quien recuperará la titularidad ante el Mallorca en la línea de ataque, junto a Aspas y Santi Mina.
También se espera el regreso de Lobotka al centro del campo, donde repetirían Pape Cheikh y Rafinha, pese a que el ex azulgrana está lejos de su nivel y que ha quedado señalado por su mal encuentro ante el Leganés. Donde no se esperan novedades es en la línea defensiva, aunque el capitán Hugo Mallo tampoco esté en su mejor momento. Aidoo y Araujo parecen fijos en el centro del eje, y el uruguayo Olaza se quedó sin recambio tras la lesión de David Juncá.
Estos cuatro hombres defenderán la meta de Rubén Blanco, el único portero sano del primer equipo de un Celta al que se le siguen atragantando, como ya sucedía con Fran Escribá, los equipos de la zona baja de la tabla que buscan ceder la pelota para buscar contras.
Por su parte el Mallorca está obligado a puntuar en su visita a Balaídos para no dejarse adelantar en la tabla por el Celta, un inesperado rival directo en la lucha por escapar de la zona de descenso de la LaLiga. Solo un punto separa a celestes y bermellones en la tabla.
Los que los han llevado a la décimo séptima plaza. Por ello su técnico, Vicente Moreno, y sus jugadores, creen que ha llegado el momento de cambiar esa dinámica negativa en Vigo aprovechando el buen momento del japonés Take Kubo, cedido por el Real Madrid, y la racha goleadora de Ante Budimir.
El nipón está destacando por su juego vertical y desequilibrante, y el croata ha marcado cuatro de los cinco goles de su equipo en las salidas, dos de ellos frente al Barça.
Otro de los argumentos de peso en el ataque de los mallorquinistas en Balaídos será el colombiano Juan Camilo “Cucho” Hernández, que jugó la última media hora en el Camp Nou tras superar una lesión que le tuvo seis meses apartado de los terrenos de juego.
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