El Celta de Vigo firmó, tras su empate sin goles ante la SD Eibar, su peor registro goleador de las últimas 27 temporadas, con solo 17 tantos a favor en 21 partidos de LaLiga Santander. Además, siete de esas 'dianas' llevan la firma del internacional español Iago Aspas, el único que ha demostrado estar medianamente fino de cara a puerta este curso. Pero eso sí, tampoco atraviesa por su mejor momento.
El equipo dirigido por Óscar García Junyent encuentra en la falta de pegada la principal clave que explica su crisis de resultados. Y es que el Celta no gana un partido en el campeonato doméstico desde el 24 de noviembre. Aquel día, el equipo celeste logró la victoria a domicilio en La Cerámica, ante el Villarreal CF, por 1-3.
Su equipo está peleado con el gol, y de momento la dirección deportiva que lidera Felipe Miñambres no ha atendido su deseo de fichar un futbolista de ataque. “Hay equipos que tienen jugadores que meten 15, 20 ó 25 goles. Nosotros, de momento, no tenemos eso. Nos falta gol", lamentó Óscar García tras el empate de los suyos ante el Eibar.
Hay que remontarse a principios de la década de los 90 para encontrar un Celta menos goleador que el actual. Los 17 tantos de esta temporada sólo son empeorados por los 16 de la temporada 1993-94 y los 13 del curso anterior a estas alturas de campeonato. Desde entonces, la historia de cara a gol ha sido bien distinta, hasta ahora.
En la jornada 21 de la pasada campaña, el Celta sumaba 33 goles, de los cuales nueve los había hecho el internacional uruguayo Maxi Gómez, traspasado el pasado verano al Valencia CF. Y un curso antes, los olívicos llevaba a estas alturas de campeonato un total 38 goles, con 11 del atacante charrúa.
La baja de Maxi Gómez la suplió el conjunto celeste con el regreso de Santi Mina, incluido en la misma operación, y su compatriota Gabriel Fernández, fichado del Peñarol. El vigués suma únicamente dos goles, mientras que el 'Toro' no ha sido capaz de ver puerta en más de una ocasión en el que está siendo su primer año en Balaídos.