Con la temporada suspendida durante las próximas jornada a causa del coronavirus y por ende, sin poder certificar la continuidad en LaLiga Santander, el Celta de Vigo ha iniciado algunos movimientos pensado en la próxima campaña. Una de las primeras decisiones, y de las más trascendentes, es conocer o no la continuidad de su director deportivo, Felipe Miñambres.
Con cuatro años en el cargo, donde la plantilla ha bajado de calidad debido a las importantes ventas, la valoración del trabajo de Felipe Miñambres será analizada por Carlos Mouriño, presidente y máximo accionista del club. Mouriño, tal como adelanta el Faro de Vigo, será el juez, salvador o verdugo, de Felipe Miñambres.
Las salidas de Lobotka, Maxi Gómez, Borja Iglesias, Daniel Wass, Jonny, Pape o Nolito han supuesto casi 110 millones de euros en ingresos en estas últimas cuatro temporadas lo que ha propiciado que el club presente importantes beneficios en los últimos ejercicios.
Bajo la dirección de Miñambres han llegado a Vigo Pione Sisto, Maxi Gómez Lobotka, Fran Beltrán, Araujo, Okay Yokuslu o Aidoo, futbolistas que han dado un buen rendimiento que ha permitido incluso su venta. Estas son las notas positivas, pero casos como los de Emre Mor, Denis Suárez, Toro Fernández, Santi Mina han sido o están siendo una decepción.
El director deportivo, que ha confesado sentirse muy a gusto en Vigo, siempre ha indicado que su situación no es importante ya que todos los esfuerzos del Celta están encaminados en salvar al equipo del descenso. Lo cierto es que esta decisión se deberá tomar cuanto antes ya que con la crisis del coronavirus el próximo verano será más corto para planificar la plantilla ya que se espera terminar la actual temporada a finales del mes de junio.