La crisis del coronavirus no es estrictamente sanitaria, aunque esta sea la más grave de las situaciones que acarrea. También implica una dura crisis económica y social que en estos momentos de parón afecta especialmente al fútbol español. Los equipos de LaLiga Santander y LaLiga SmartBank han visto disminuir el valor de los jugadores de sus plantillas, tal y como reflejan los datos que aporta el portal de Transfermarkt. La plantilla del Celta de Vigo, por ejemplo, pasa de 181,6 a 146,35 millones de euros.
Es decir, afronta una pérdida de 35,25 millones, un 19,4% de su valor total, ya que todos los jugadores han visto devaluado su precio en el mercado. Iago Aspas es de los que más acusa el parón por el COVID-19 y su curso más que discreto para bajar de los 20 millones a los 16.
En la misma línea está Santi Mina, que pierde 3,5 millones de euros para quedarse en 14,5. Fran Beltrán también baja, pero sólo pierde 1,5 millones de euros de cotización aún siendo un habitual suplente. Su valor está en estos momentos en 13,5 millones.
Brais Méndez, con tres millones menos protagoniza otra importante bajada en el Celta, para quedarse con un valor actual de 12 millones. Rafinha Alcántara también pierde valor por culpa del COVID-19, exactamente 2,5 millones de euros. De este modo, su cotización actual es de 9,5 millones. En los mismos números se mueve Denis Suárez, de 12 millones a 9,5.
Rubén Blanco baja de 10 millones de euros a 8 millones a pesar de su buena temporada. Fedor Smolov pierde otros 2 millones, devaluándose de 9 a 7, mientras que Jeison Murillo y Joseph Aidoo se devalúan 1,5 millones de euros, de 8 a 6,5 ambos. Okay Yokuslu pierde el mismo valor pero partiendo de una cotización menor, de los 7,5 a los 6.
Las bajadas continúan con Néstor Araujo, Pape Cheikh y Pione Sisto, todas por encima del millón de euros. También la cotización de Lucas Olaza baja de 4 a 3,2 sin importar su gran curso. Así, hasta la totalidad de la plantilla, con descensos de valor que van desde los 800.000 euros a los 300.000.