Pape Cheikh vuelve a ser historia en el Celta de Vigo por segunda vez. El jugador del Olympique de Lyon ha terminado su cesión sin haber demostrado nada que hubiese invitado al club olívico a plantearse pelear por el fichaje de un canterano vendido hace tres años por 10 millones de euros. Ahora, tras una temporada nefasta, en lo colectivo y personal, Pape Cheikh pide perdón al celtismo.
"Temporada difícil para todos, con más sufrimiento del necesario", indicaba Pape en su cuenta de Instagram en la noche de este pasado martes. El centrocampista cree que al menos se ha logrado "el objetivo básico" y destaca las "lecciones múltiples aprendidas".
El jugador de 23 años también quiso agradecer "el apoyo recibido en los momentos más duros" para terminar despidiéndose con un "ahora, más que nunca, afouteza".
Ahora Pape regresará a la disciplina del Olympique de Lyon, que no cuenta con él, y deberá encontrar un nuevo equipo donde recuperar casi tres temporadas en blanco. Al canterano del Celta aún le restan dos temporadas más de contrato con el cuadro del Ródano, con el que solo ha jugado 986 minutos en 25 partidos repartidos en dos temporadas.