El Celta de Vigo ha vuelto al trabajo este martes tras su histórico tercer triunfo en Liga como visitante al Barcelona. Los de Coudet lograron asaltar el Camp Nou con un equipo plagado de bajas por lesión. Hasta nueve futbolistas del primer equipo tenían distintos problemas físicos. De ellos solo Iago Aspas pudo jugar aunque terminó pidiendo el cambio por una lumbalgia. El Chacho recuperará al moañés y también a Joseph Aidoo, que se lesionó en el calentamiento. Otros jugadores ya han comenzado a trabajar sobre el césped de la Ciudad Deportiva Afouteza apurando sus opciones para cerrar la temporada ante el Betis en Balaídos. Renato Tapia, Rubén Blanco y Hugo Mallo podrían llegar a tiempo, pero los servicios médicos quieren ser cautos ya que el equipo no se juega nada ante el Real Betis.
El que tiene más opciones de recibir el alta médica es Hugo Mallo. El capitán sufre una sobrecarga en el aductor medio de su pierna izquierda. Una lesión de escasa gravedad pero que le obligó a quedarse en Vigo el pasado fin de semana. El defensa realiza entrenamiento individual pero en las imágenes difundidas por el Celta se le ha podido ver correr con Fran Beltrán, Kevin Vázquez y Carlos Domínguez.
Rubén Blanco, que ya está atajando en los entrenamientos que el primer equipo realiza en Mos, sufrió una rotura de alto grado del ligamento lateral interno de la rodilla izquierda el pasado mes de marzo. Los servicios médicos del club establecieron un periodo de baja de unas ocho semanas que ya se cumplieron a principios de mayo. Sin embargo al tratarse de la segunda lesión de su carrera en ese ligamento el doctor García Cota desveló que querían ser muy prudentes con el canterano.
Si el Celta necesitase de su presencia el mosense podría haber jugado ya algún partido en el tramo final de esta temporada. Pero con Iván Villar parando a un buen nivel y con Patrick Sequeira de suplente no hay necesidad de forzar a Rubén Blanco para un duelo en el que los de Coudet solo se juegan los tres puntos ya que no pueden mejorar ni empeorar su posición en Liga.
Renato Tapia, que también pudo hacer trabajo sobre el campo no ha visto modificado su parte médico. En el se refleja que el peruano sigue un proceso de recuperación mediante fisioterapia. El pivote cayó lesionado el 30 de abril, una rotura fibrilar de grado I en el bíceps femoral izquierdo que le obligaría a permanecer tres semanas de baja. Estas se cumplirán este próximo fin de semana de ahí que parezca complicado que Coudet se arriesgue con él. Tapia está citado para jugar la Copa América y no querrá tomar riesgos innecesarios.
Jeison Murillo y Facundo Ferreyra, con sendas roturas fibrilares, están completamente descartados para el partido de este sábado. Ambos jugadores podrían decir adiós al Celta al finalizar su temporada. Murillo deberá regresar a la Sampdoria, con quien tiene contrato hasta junio de 2023, mientras que Ferreyra termina su contrato en Vigo sin haber convencido al club para ampliar su vinculación.