El Celta de Vigo confiaba a principios de verano en lograr, sin excesiva dificultad, la salida de Okay Yokuslu y Emre Mor. Los dos futbolistas turcos querían abandonar el club, ambos habían mostrado una total predisposición para hacerlo, algo que no ha cambiado actualmente. En el seno de entidad celeste se confiaba en recibir ofertas por el mediocampista desde Inglaterra y en poder acordar la rescisión del último año de contrato de Emre Mor a través de un club que abonase parte de la ficha que debe percibir este curso. A falta de menos de dos semanas para que se cierre el mercado de fichajes ninguna de las dos salidas se ha producido lo que provoca que el Celta disponga de menos recursos para cerrar las contrataciones de un defensa central y un delantero centro.
La situación que mayores réditos económicos proporcionaría al Celta de Vigo y que más masa salarial liberaría es la venta de Okay Yokuslu. El club aún debe amortizar más de dos millones de euros del pago realizado al Trabzonspor, a los que hay que sumar su ficha anual, en los dos años de contrato que tiene el mediocampista turco con el club vigués. En A Sede se contaba, porque así lo había asegurado Batur Altiparmak, con ofertas en firme tras la finalización de la Eurocopa.
Finalmente no fue así pero el agente de Okay estuvo en Vigo para presentar una oferta hace unos días. El propio Eduardo Coudet señaló que había decidido no contar con el jugador porque se futuro se estaba dilucidando y era incierto por ello apostó por no citarlo en el último amistoso de la pretemporada ante los Wolves y en el primer partido de liga ante el Atlético de Madrid. Hasta el momento Okay Yokuslu aún no ha cerrado su marcha a la Premier League, donde equipos como el Wolverhampton Wanderers, Crystal Palace, Watford o West Bromwich Albion han mostrado su interés en él.
En el caso de Emre Mor la situación cambia de forma radical. Okay Yokuslu es un miembro más de la plantilla viguesa y si no sale antes del 31 de agosto formará parte del equipo a todos los efectos. Emre Mor está apartado, entrena en solitario y no cuenta para Coudet. El jugador es consciente de que debe buscar una salida y que no podrá cobrar la altísima ficha, nada acorde a su pésimo rendimiento, en el nuevo club que le de una oportunidad para redimirse.
El extremo se ha puesto en las manos de Mino Raiola para poder encontrar equipo pero hasta el momento no ha logrado tal propósito. El futbolista ha recibido algunos sondeos que no terminaron de fructificar. El Celta le ha concedido la carta de libertad y está dispuesto a sufragar una parte de su actual ficha si su nuevo equipo no se hace cargo de la totalidad de la misma. También espera que el jugador sea capaz de perdonar una parte de su sueldo para poder salir en verano y no pasarse otro año en blanco.
Sin la salida de ambos futbolistas la dirección deportiva celeste tiene menos recursos para poder cerrar las contrataciones de los dos fichajes que demanda Coudet. En las últimas horas distintos jugadores han sido relacionados con el Celta. Los defensas Bruno Fuchs, Mustafi o Vezo y los delanteros Ezequiel Ponce o Calleri. Por ahora ninguno de ellos parece que esté cerca de poder convertirse en jugador celeste.
Ofertas siempre hay, otra cosa es la disposición del club contratante de firmar por mayor o igual salario que ahora tienen, así como de los propios jugadores de perder masa salarial. El Emre es un caso perdido, que pase el año que le queda de contrato y que el club aprenda de lo ocurrido. Okay en cambio, SÍ es aprovechable. Se le ha probado este verano en el eje defensivo y no ha desentonado. Jugador expeditivo que se aviene a esa posición que tanto ocupa y preocupa al club. La duda estriba en la ilusión del chico, puede que escasa por no haber recalado en las islas o recobrada gracias al nuevo reto. La vida y el fútbol pegan los giros más insospechados y quién sabe.. quizás en un año se celebre no haberle traspasado