El último día de Denis Suárez como jugador del Celta de Vigo en Balaídos acabará con el celtismo entregado al jugador. El destino tenía preparado un último capítulo, un último párrafo, lleno de emociones a flor de piel. Denis Suárez, poco acostumbrado a marcar goles aparecía desde segunda línea. Intercambiándose los roles era Iago Aspas quien asistía a su compañero. De primeras Denis batía a Kiko Casilla y la grada estallaba para celebrar el 1-0.
El gol, como ya había sucedido en el anterior partido en Balaídos ante el Alaves, iba a servir de plebiscito en el celtismo. Del '¡Denis, Denis, Denis!' se pasó el '¡Denis, quédate!'. También se oyó el 'Denis sí, Mouriño no' pero de manera minoritaria. La afición del Celta volvió a dictar sentencia. Balaídos volvió a posicionarse a favor de Denis Suárez en su conflicto con el club tras la marcha de Bryan Bugarín al Real Madrid a través de Intermedia Sport Player.
Denis Suárez apura sus últimos minutos de celeste, sus últimos sorbos como jugador del equipo en el que creció desde niño, mostrando su mejor fútbol. Cuatro goles y cuatro asistencias para el canterano deseado por Carlos Mouriño hace tres temporadas y ahora repudiado. Los cánticos se repitieron al filo del descanso, cuando Denis Suárez sacó una falta pegada a la grada de animación.
Los goles no dan la felicidad, pero...
Nah, sí que la dan 😊#CeltaElche #RCCelta pic.twitter.com/q9zD6GHWDb
— RC Celta (@RCCelta) May 15, 2022