Aspas, la luz para salir del pozo del descenso

Un solitario gol de Iago Aspas en el 71' permitió al Celta de Vigo reencontrarse con la victoria en el último partido de la primera vuelta ante el Athletic Club. Un gol que permite al Celta salir de los puestos de descenso y seguir en la pelea con media docena de rivales. Como una montaña rusa vivió el Celta su trascendental partido ante el Athletic Club. Las victorias de Valladolid y Cádiz habían metido a los de Carvalhal en puestos de descenso antes de comenzar el encuentro. El VAR le birló a Carles Pérez el ansiado gol cuando el reloj solo había sumado 27 segundos. Salía con ganas el Celta a pelearle al Athletic con sus armas, juego directo y transiciones rápidas. Más cómodo el cuadro bilbaíno se hizo con el control del juego llegando a acorralar a lo vigueses durante muchos minutos. Perdonó Berenguer el 0-1. Se rehízo el cuadro olívico al final de la primera parte y comenzó el segundo tiempo con otra cara. La entrada al campo de Beltrán y Larsen animó a un Celta que terminaría adelantándose en el 71' con un gran gol de Aspas a pase de Luca de la Torre. A pesar de lo que estaba en juego sobre el césped de Balaídos supo gestionar bien el cuadro celeste el final del partido que solo sufrió fruto de su propio nerviosismo.

Con defensa de cuatro y cuatro caras nuevas arrancaba el Celta su partido ante el Athletic Club. Hugo Mallo, Fran Beltrán, Franco Cervi y Strand Larsen eran las piezas sacrificadas por Carlos Carvalhal para dar entrada a Javi Galán, Renato Tapia, Óscar Rodríguez y Carles Pérez. El técnico sentaba a varias 'vacas sagradas' apostando por una delantera sin un nueve de referencia. Como había sucedido ante el Villarreal Gabri Veiga y Iago Aspas, los máximos goleadores del Cdleta con ocho y cuatro tantos en Liga, formaban la punta de lanza ante un rival que por primera vez desde el 20 de abril de 2016 no iba a contar con Iñaki Williams. Su lugar era para Gorka Guruzeta, autor de cinco goles en apenas 400 minutos de juego.

Con Balaídos presentando una de las mejores entradas de la temporada rugía las gradas con la primera acción del partido. Carles Pérez se aprovechaba de una indecisión de Dani Vivian para plantarse en al frontal. Con un durísimo remate al palo corto batía a Unai Simón pero el gol no subía al marcador por una mano en el salto con el central del Athletic. A los 27 segundos de partido había llegado una ocasión que hubiese cambiado por completo el trámite del duelo. Se gustaba el Celta en las transiciones en conducción de Gabri Veiga. A punto estuvo de aprovecharse el cuadro celeste en una combinación con Carles Pérez.

Con muchísimo ritmo arrancaba el encuentro. Nos se amilanaba el Athletic Club que encontraba un hueco en el costado diestro celeste por medio de Yuri Berchiche. Marró Nico Williams en el remate tras la buena entrega del lateral zurdo. Advertía en la previa Carlos Carvalhal que habían trabajado para zafarse de la presión que ejerce el cuadro rojiblanco. Le costaba salir con la pelota jugada el Celta. Se apoyaba en los balones en largo de Marchesín. A la contra tenía una más el Celta. Carles Pérez y Aspas lanzaban un ataque que dejaba completamente solo a Luca de la Torre. Con todo a favor el de San Diego no pudo cruzar lo suficiente el balón para superar a Unai Simón. Desperdiciaba una gran ocasión el estadounidense en el 12'.

No existía el mediocampo. La pelota pasaba de las defensas al ataque con un ritmo que ambos equipos no podrían sostener en el tiempo. El Celta se adaptaba al fútbol directo de los de Valverde haciéndole daño con sus armas. Cada golpe vigués encontraba respuesta bilbaína. Berenguer estrellaba el balón en el lateral de la red y Berchiche mandaba el esférico a las nubes tras una internada por banda de Nico Williams y la indecisión de Ander Herrera en la frontal. Con el paso de los minutos se hacía más fuerte el Athletic Club. Hasta cinco saques de esquina, algunos con verdadero peligro, metían a los de Carvalhal en su campo. Sufría por su costado Javi Galán las internadas de Williams. Tampoco estaba cómodo Mingueza.

Por el lado derecho llegó la mejor oportunidad del partido. El Celta se había descompuesto. Se deshacía como un azucarillo en un vaso de agua. Los de Valverde llegaban a placer. Berenguer fallaba lo imposible al estrellar al palo una pelota que Guruzeta la había servido en bandeja. Se le estaba haciendo largo el primer tiempo a los vigueses. Apenas eran capaces de superar la medular. Su juego, lento y previsible, era neutralizado por la presión rojiblanca. Solo una arrancada de Mingueza con Aspas y Galán dando continuidad al ataque rompió el monólogo vizcaíno. El centro del pacense fue despejado por la zaga rojiblanca.

No dio tiempo para más en una primera parte en la que los de Carlos Carvalhal pudieron sobreponerse e igualar fuerzas ante un Athletic Club que no pudo aguantar en los últimos cinco minutos el altísimo ritmo que le quiso imprimir al partido desde el pitido inicial. Carvalhal apostaba por cambiar dos piezas al descanso. No le había gustado el funcionamiento de su medular. Óscar Rodríguez y Renato Tapia eran sustituidos por Beltrán y Strand Larsen. También Valverde quitaba del campo a Ander Herrera para jugar con Sancet.

Aspas, la solución a todos los males

El Celta era mejor en el arranque del segundo acto. Strand Larsen fijaba a los centrales. Gabri Veiga y Beltrán generaban más juego. El Celta rondaba la meta de Unai Simón ante un Athletic que se defendía abusando de las faltas y los agarrones. Díaz de Mera, muy permisivo, no castigaba el juego rojiblanco. Un doble disparo de Iago Aspas, en falta directa y tras recoger el rechace, eran el aviso de lo que iba a llegar poco después. Valverde, consciente de que el partido se le estaba escapando a su equipo, introducía tres cambios más. Tenía una más Carles Pérez pero el 1-0 tenía un solo dueño, Iago Aspas.

El moañés recibió un pase de Luca de la Torre. Con su inteligencia supo proteger la pelota ante Vivian. Se plantó en el área y puso la pelota al segundo palo. Unai Simón no podía llegar al esférico y Balaídos estallaba en el 71'. El Celta había sido mejor en el segundo tiempo y encontraba el justo premio a su juego. Supo dormir el partido el Celta. Apenas nada sucedió en los últimos 20 minutos. El 1-0 era un botín a conservar. Kevin Vázquez y Cervi entraban para apuntalar la defensa. El Athletic parecía aceptar la derrota. Solo en el descuento se acercó al área viguesa en un saque de banda sobre Raúl García. El Celta salía de los puestos de descenso gracias a los tres puntos obtenidos en el último partido de la primera vuelta. Lograba ganar de nuevo en Balaídos, algo que no sucedía desde el pasado 2 de octubre ante el Betis.