Tres puntos de oro para el Celta de Vigo en un choque en el que el aficionado neutral ha gozado con lo sucedido en el Benito Villamarín. Celta y Betis ofrecieron un duelo atractivo donde se golpearon hasta el último aliento a base de golazos que iban cambiando el desarrollo del partido. Empezó golpeando Larsen, se revolvió el Betis gracias a dos errores de Galán y Aidoo. Replicó Gabri Veiga con una vaselina sobre Rui Silva al filo del descanso para darle la vuelta al resultado en la segunda mitad. Parecía sentenciar Aidoo pero Fekir, desde el punto de penalti, metió a los suyos en el 84'. Siete goles adornaban el marcador. Pudieron ser más porque los dos equipos tuvieron ocasiones para cambiar el 3-4. Sabaly salvó bajo palos un disparo de Aspas. Aspas y Solari tuvieron una más mientras que Edgar, en un larguísmo descuento con tangana y expulsión a Luiz Felipe por medio, pudo poner el empate a cuatro con dos testarazos pasando el minuto 100. El Celta se aleja de los puestos de descenso con un segundo triunfo seguido ante un equipo de la zona alta. El plan de Carvalhal empieza a transformarse en victorias y puntos.
Sin Agustín Marchesín, baja para lo que resta de temporada por la rotura del tendón de Aquiles de su pierna izquierda, afrontaba el Celta un durísimo encuentro ante el Betis de Pellegrini en el Villamarín. El vestuario quería dedicarle la victoria a su compañero. Un triunfo que se antojaba vital para salir del pozo. Al menos en esta jornada, gracias a los tres puntos sumados ante el Athletic Club, no partían desde los puestos de descenso. Incluso la plantilla saltaba al campo sabiendo que ni la derrota les mandaría al descenso en este primer partido de un complicadísimo mes de febrero.
Iván Villar, Fran Beltrán y Strand Larsen eran las novedades que proponía Carlos Carvalhal. El noruego abría el marcador en los primeros compases del duelo haciendo bueno un centro a media altura de Carles Pérez. Dominaba la posesión el cuadro bético con Canales, Guardado y Fekir, pero el 0-1 era obra de Strand Larsen. En el minuto 6 remataba de primeras al palo corto. No tenía tiempo para la reacción Rui Silva. El Celta lograba lo más complicado pero nada le duró la ventaja. Un saque de esquina, un rechace fortuito y un grave error de Javi Galán tirando la línea del fuera de juego fueron suficientes para que, en su primer remate entre los tres palos, el conjunto sevillano pusiese las tablas en el marcador.
Todo volvía al principio antes del 10' con el tanto de Juanmi. El cuadro de Carvalhal pagaba muy caro el error de su lateral izquierdo. No cambiaba el empate el desarrollo del partido. Dominaban los de Pellegrini. Llegaban con peligro a la meta del de Aldán. Y de nuevo con un error, más grave si cabe, llegaba el 2-1. Aidoo recibía de espaldas, hacía una pésima entrega que llegaba a las botas de Juanmi. El delantero encontraba a Guardo y este a Borja Iglesias. Todo al primer toque para que Canales fusilase a Iván Villar. En el 23' ya mandaba el Betis en su estadio.
Intentó reaccionar el Celta para enmendar sus errores. El Betis había aceptado los dos regalos de la zaga viguesa. Carles Pérez, el más activo con Aspas, era el estilete por banda con la que los vigueses intentaban meterse de nuevo en el partido. A los de Carvalhal les faltaba juego y creatividad en la medular. Lo porfiaban todo al desborde del catalán y al talento del moañés. Ambos buscaban con insistencia a Strand Larsen. No llegaba el empate, tampoco el 3-1. Iván Villar evitaba el tercer tanto verdiblanco con una buena estirada al testarazo de Luiz Felipe. De nuevo aparecía Iván Villar para evitar la sentencia bética. Placaba el disparo de Miranda.
Si un canterano evitaba la sentencia otro, a pase de Luca de la Torre, ponía el 2-2. Uno de los mayores talentos de LaLiga Santander se inventaba un golazo. Primero se deshacía de Luiz Felipe con un cabezazo. Se plantaba justo delante de Rui Silva y con una sutil vaselina superaba por alto al meta portugués. Gabri Veiga, el de O Porriño, marcaba su quinto gol en Liga con solo 20 años. El Celta llegaba al descanso con tablas en el marcador.
Apenas unos segundos necesitó el Betis para enseñar los dientes en la segunda mitad. Una dejada de Miranda, tras pase de Canales, estuvo a punto de terminar en gol de Juanmi. El delantero, una bestia negra para el Celta, mandó por encima del larguero el esférico. Los de Carvalhal sufrían por sus costados. El luso mandaba a los suyos adelantar líneas para presionar más arriba. No tardó en funcionarle. Primero avisó Aspas. Luego mató Veiga. Su sexto gol en Liga, el tercero al Betis, dio la vuelta al marcador en el Villamarín. El canterano solo tuvo que empujar, llegando con potencia desde atrás, un pase al corazón del área pequeña de Strand Larsen.
Con el 2-3 Carvalhal sustituía a Strand Larsen y Gabri Veiga. Los artífices de la remontaba se iban al banquillo. El noruego, muy castigado en lo físico, y el porriñés con un problema estomacal que le obligó a irse al vestuario. No tuvo que lamentar el Celta estas dos importantes ausencias ya que en su cuarto disparo entre los tres palos marcó su cuarto gol. Aidoo, con un durísimo cabezazo, ponía lejos de Rui Silva la pelota. Con el 2-4 los vigueses parecían asegurarse los tres puntos en el Villamarín. Sabaly salvó bajo palos el quinto del Celta en un manso disparo de Aspas. El moañés se quedaba sin su premio.
El Betis parecía noqueado. Abner Vinicius fallaba, casi en la línea, un gol imposible en el minuto 80. Pero no estaba escrito el final del partido porque en una acción fortuita Mingueza midió mal el despeje de cabeza. No llegó al balón y este tocó en su brazo. Del Cerro Grande tuvo que consultar el VAR. Las imágenes no ofrecían dudas. Fekir puso el 3-4 en el 84' engañando a Iván Villar. Los verdiblancos soñaban con el cuarto. Los celestes con el quinto. Lo rozó en el descuento Solari y Aspas a pase de Seferovic.
No terminó bien el partido porque Luiz Felipe fue a por Iago Aspas para quitarle el balón de las manos. Se fue el moañés al suelo doliéndose de un golpe en el cuello. El colegiado expulsó al defensa brasileño y amonestó a Unai Núñez, que se perderá el duelo ante el Atlético de Madrid, por una multitudinaria tangana. El bético acusaba al moañés de fingir. El Villamarín insultaba a Aspas mientras ambos banquillos tenían más que palabras. El descuento, de ocho minutos, se quedaba cortó. El partido se iba por encima del minuto 100. Villar atajaba un manso testarazo de Edgar. El propio Edgar tuvo una más de cabeza. Completamente solo remató fuera un centro de Fekir. Fue la última jugada de un partido vibrante que le da al Celta tres puntos que le colocan más lejos de los puestos de descenso.